Ivar Køhn ya es por fin un hombre feliz. Presidente del Consejo del Nordic Film & TV Fund y responsable de Drama en la televisión pública noruega (NRK), Køhn ya tiene por fin un Emmy Internacional del que presumir, el ganado en noviembre de 2015 por Anneke von der Lippe, protagonista de Øyevitne / Eyewitness.
Y es que lo que el también guionista y antiguo ejecutivo de desarrollo en Suecia fue a contar al Helsinki Script fue cómo la industria audiovisual noruega se había volcado para poner sus series en el mapa internacional. Para eso hubo que reforzar las relaciones entre cine y televisión y crear una red internacional, con la idea de subir la calidad a cada paso. Køhn, capaz de explicar sus ideas sobre la creación dramática en términos casi místicos (“es lo más importante en la vida, porque permite a los seres humanos verse a sí mismos”), esbozó la estrategia en la que se lleva trabajando desde 2004.
Una de sus piezas fundamentales es un encuentro anual que se celebra todos los años en enero en Losby, a las afueras de Oslo, en el que durante dos días creativos y ejecutivos se encierran para presentar las series en proyecto, analizar casos de éxito, asistir a talleres sobre desarrollo y financiación y mejorar su conocimiento sobre el estudio de audiencias.
El apoyo público también es fundamental: el Instituto del Cine Noruego invierte una cadena proporcional a lo que pongan las cadenas en la producción de una serie, siempre con la condición de que la productora mantenga los derechos sobre la misma.
No todo les ha salido bien (por ejemplo, un proyecto para trabajar con mentores internacionales no funcionó), pero su receta para ganar un Emmy Internacional se basa en cuatro ingredientes: “Céntrate en el guion” / “Sé local” / “Haz gran drama” / “Trabaja en equipo”.
Y esto último se materializa de formas sorprendentes. No sólo el encuentro anual en Losby se financia por las principales cadenas del país, sino que estas han llegado a un acuerdo tácito por el que nunca enfrentan a dos series nacionales. Noruego no come noruego, y series notables como Occupied o Mammon son resultado de ello.

Ivar Køhn explicando cómo ganar un Emmy Internacional, con Liselott Forsman, directora de la jornada, y Petri Kemppinen, director ejecutivo del Nordic Film & TV Fund.
La idea de que cada proyecto debe girar en torno al guion fue omnipresente en el Helsinki Script. Quizás uno de los participantes que lo demostró de manera más contundente fue Sigurjon Kjartansson cuando habló del proceso de creación del thriller islandés Ófærð / Trapped, emitido con éxito por la BBC.
Puede que Trapped haya sido vendida como una serie de autor del director Baltasar Kormákur, pero Kjartansson fue su verdadero responsable creativo. Para ello, trabajó primero durante meses desarrollando la idea inicial de Kormákur con dos guionistas islandeses mientras el proyecto se financiaba.
Una vez que se lograron, gracias a los mercados francés y alemán, el presupuesto de siete millones de euros, Kjartansson creó un segundo equipo con el británico Clive Bradley, el alemán Klaus Zimmermann y la francesa Sonia Moyersoen. Los cuatro estuvieron todo el 2014 trabajando los guiones a distancia, salvo por cinco encuentros de trabajo intensivos. Para Kjartansson esos encuentros, basados en la discusión constantes, fueron fundamentales para dar a la serie la profundidad que se buscaba y recordó la insistencia de Moyersoen en que cada personaje estuviera perfectamente desarrollado: “Creo que logramos hacer a cada personaje humano”.
Quizás a algún lector haya sorprendido que Ivar Køhn colocara el “Sé local” entre los cuatro ingredientes para hacerse un hueco en el mercado internacional. Y es que no hace falta borrar las huellas culturales del país, más bien al contrario. Kjartansson explicó en su presentación que Trapped se basaba en una metáfora propiamente insular: la de sentirse atrapado.
Y cuando en el Festival de Copenhague entrevisté a Anders Toft Andersen, el productor que desarrolló Follow the Money junto con el guionista Jeppe Gjervig Gram, me insistió en que para poder contar de forma universal una historia sobre la corrupción financiera debían utilizar a protagonistas que representaran a los tres grandes sectores de la sociedad danesa. Pero nadie lo dijo más claro que Hanne Palmquist, responsable de Programación Original de HBO Nordic: “Lo que buscamos es programación local enraizada en esta región”. Aviso a navegantes: para series que quieran parecer norteamericanas, ya está HBO.
Conchi Cascajosa. 20.10.2016
Lee aquí las otras entregas de esta serie: Crónicas Nórdicas /1 y Crónicas Nórdicas /3.