Un lector de Bloguionistas nos remite el siguiente texto:
Hola, hola, soy Dani de Madrid. Tu libro es el mejor manual que he tenido el placer de leer, releer y subrayar; es preciso y ameno, y tiene unos ejemplos muy bien puestos; y ver a Frasier, Niles y Martin en la portada es simplemente… inspirador.
Verás, estoy preparando una prueba para una serie pero me ha surgido un problema simple y sencillo: ¿Cómo enviarla?
Hasta ahora yo llamaba a las productoras preguntando por si hacían pruebas o admitían pruebas de guión. Cansado de recibir negativas las hacía por mi cuenta y se las he estado enviando al productor ejecutivo o coordinador de guiones por correo certificado. No sé si está bien o no y eso me corroe por dentro pero sobre todo quiero saber: ¿Qué buscan exactamente en una prueba?
Yo he estado enviando un par de escenas de dos o tres páginas y a veces la escaleta de una trama… Sé que hay que demostrar que se conoce a los personajes, que se tiene el tono cogido por los cuernos, que se conocen los mecanismos internos de la estructura de la serie… pero, como diría Josh Bartlett: «Qué más». ¿Qué es eso que decanta la balanza? ¿Hay que seguir fielmente lo ya escrito o se valora más un planteamiento nuevo, fresco y original? Llevo casi cuatro meses enviando pruebas y ni una triste llamada, ¿Qué hago mal? ¿Hago bien en enviar pruebas a lo loco sin que me las pidan? ¿Algún consejo?
Y una duda, ya que estamos, respecto a los interiores y exteriores. ¿Cuándo se rueda en plató simulando un exterior qué se pone, simplemente interior, o se especifica que es un falso exterior de algún otro modo?
Muchas gracias y espero que Hugo le pregunte ya a Jacob «¿Qué es la isla?» para saber si he ganado la porra o no.
Saludos, Dani.
Hola, amigo Dani. En primer lugar, gracias por esa correcta dosis de peloteo con la que ya tengo mi ración diaria para alimentar el ego, que tiene siempre mucha hambre. Me alegra que el libro te haya podido servir de algo más que para calzar mesas.
El asunto de las pruebas es uno de los que más interés suscitan entre la gente que empieza y ya hemos hablado de él en alguna ocasión, aunque desde otras perspectivas. Las preguntas que te haces son lógicas, y todos nos las hemos planteado en algún momento. Ahora que estoy “al otro lado” y me he visto más de una vez en el brete de leerme y elegir pruebas, veo las cosas de otra manera y espero poder ayudarte en algo con una serie de reflexiones que, por supuesto, no dejan de ser personales y simplificadoras…
– Las pruebas se piden, sobre todo, cuando se busca gente con poca experiencia que no tiene una trayectoria profesional que “demuestre” su oficio y/o talento. Por lo tanto, es comprensible que la mayoría de las pruebas que se reciben tengan un nivel bastante bajo. ¿Eso qué implica? Que no hay que preocuparse por ser Billy Wilder (porque si te preocupas en exceso por ello, seguramente meterás la pata). Lo que se busca en esas pruebas son otras cosas…
– Como bien dices, se espera que se haya entendido cómo es la producción elegida para escribir. Debes captar el ritmo, la personalidad de los personajes y el tono… Sólo con conseguir esto, ya estarás por encima del 90 % de las pruebas recibidas. Muchas veces lo que se busca son “aprendices” capaces de echar un cable con una escaleta, una prueba de casting, algunas escenas… mientras van aprendiendo poco a poco. Por eso es fundamental que hayan demostrado que saben adaptarse a tu ficción.
– Y luego está… la chispa. Aquí es donde entra en juego el posible talento innato de cada uno. Además de gente sensata y ordenada, en todos los equipos hace falta gente que tenga “ingenio”, aunque adolezcan de otras carencias. Y no me estoy circunscribiendo a las comedias; con “ingenio” me refiero a la capacidad para encontrar alternativas, giros, diálogos, chistes o situaciones, que no suenen a trillados; que sorprendan sin ser locuras; que encajen perfectamente sin ser lo de siempre. Yo he estado en producciones donde se ha contratado a gente por dos líneas de diálogo “refrescantes”, incluso a pesar de que el resto de la prueba no tuviera demasiado sentido. Por eso, creo yo, además de tener en cuenta estructuras, tono y personajes, a veces hay que lanzarse también a la piscina y buscar la provocación y el brillo. No tratando, como decía, de ser Billy Wilder, sino de aportar un punto de vista más personal. Pero, evidentemente, este tipo de hallazgos son mucho más difíciles de definir, obtener y juzgar, sobre todo por uno mismo…
– Un buen consejo sería intentar que el conflicto o las situaciones que plantees sirvan para aprovechar y desarrollar al máximo las idiosincrasias de los personajes que las protagonizan. Lo que realmente atrapa a los espectadores son los personajes y, de la misma manera, los que los escribimos apreciamos la lectura de unas líneas que te hagan decir “lo ha clavado, éste es él en su pura ensencia…”
– Y, por supuesto, lo que siempre decimos: REESCRIBIR es lo más importante. Hay pruebas que se nota que se han hecho por probar, o para quitárselas de encima lo más rápido posible. Una buena escena deberá estar bien estructurada, pensada y rematada.
– Respecto al material que se debe enviar -y hablaré de televisión, que es lo que más conozco y donde funciona más el asunto de las pruebas- lo mejor es siempre saber qué es lo que se demanda. Lo habitual suele ser una trama escaletada (o incluso un capítulo entero, si hablamos de una serie corta o de un coordinador hijoputa), más algunas escenas dialogadas. Lo mejor es escribirlas de la serie en cuestión a la que aspiras a entrar, aunque también puedes arriesgarte y hacerlo con una producción de tono semejante. En “7 Vidas”, por ejemplo, aceptábamos pruebas de “Frasier”, “Seinfeld”, “Friends”… (vale, sí, yo también hago chistes al respecto).
– En cuanto a la manera de enviar las pruebas, siempre es recomendable enterarse de dónde están buscando a gente. Dudo mucho que una prueba que aterriza sin haber sido solicitada llegue a dar ningún resultado, más teniendo en cuenta que, si estás empezando en el oficio, te será difícil escribir unas escenas tan epatantes que sean capaces de venderte por sí mismas (y si no estás empezando, también). Sin embargo, tampoco digo que sea un estrategia inútil. Enviar currículums a lo loco muy pocas veces da resultado, pero a veces pasa, y hay que probar todas las puertas…
– Eso sí, la información es poder, así que hay que estar al día de lo que se está haciendo, de nuevas producciones y productoras punteras, y tirar de conocidos que puedan decirte en qué empresas están abiertos a recibir pruebas. Por supuesto, si puedes enviarla a través de alguien que te conozca, tendrás muchas más posibilidades de ser, al menos, tenido en cuenta.
– Por supuesto, importan y mucho las cuestiones de forma: utiliza un formato profesional (si consigues algún guión de la serie en cuestión, mejor que mejor); NADA de faltas de ortografía ni errores tipográficos (parecerá que no te has trabajado mucho la prueba); no metas dibujitos ni churriguerescas portadas; sé concreto, educado y directo en tu carta de presentación; y añade siempre un currículum actualizado y no excesivamente extenso… (no incluyas el premio al mejor cuento que te dieron en la guardería).
– Y, por último, no te hundas si no recibes respuesta. Es normal, y más si has enviado una prueba no solicitada. Piensa que en la mayor parte de las producciones las pruebas las lee gente que está hasta arriba de trabajo (el coordinador de guión, habitualmente), y con frecuencia no tienen tiempo de responder a cada prueba educada e individualmente (porque para hacerlo de otra manera, es mejor no hacerlo). Lo habitual es que sólo se pongan en contacto con aquella gente que quieren contratar o a la que quieren conocer en persona para hacer una entrevista personal. Así que puede que tu prueba estuviera bien, pero que simplemente hubo una o dos mejores y te quedaste fuera…
Estos dos últimos años están siendo difíciles. Incluso para los guionistas profesionales no resulta fácil encontrar un puesto de trabajo, así que imagino que los principiantes lo deben estar flipando. Pero la mala racha está empezando a pasar, y se preparan bastantes nuevas producciones que irán abriendo horizontes.
No hay recetas mágicas aparte del esfuerzo, el empeño, la paciencia y el talento. Y, por supuesto, aprovechar las oportunidades. Si consigues que te llamen para trabajar en algún sitio, empléate al máximo, incluso aunque te paguen una mierda y el proyecto no te entusiasme. Algún día esa gente puede contar contigo para otro proyecto, si has encajado bien en el equipo. No hay nada más decepcionante que ver a una joven promesa que entra en un equipo gracias a una buena prueba, y la fastidia por llegar con absurdas ínfulas o con pocas ganas de dar el callo. Y he visto unos cuantos casos, créeme…
Y en cuanto a tu última cuestión, más técnica, cada producción puede que tenga sus propias normas, pero lo normal es que pongas EXT. Si luego se rueda en un plató eso ya es cosa de la producción, pero si la escena es exterior, es exterior.
Un saludo, ánimo, y mucha mierda.
De acuerdo en todo. Sobre todo en lo de la rescritura. Pero disiento en el primer punto. Sé de gente con experiencia que ha conseguido trabajos mediante pruebas. Y gente con experiencia que ha hecho pruebas y no ha conseguido un trabajo. Por eso creo que lo de rescribir es especialmente importancia. Cuando hagas una prueba tienes que pensar que también la estarán haciendo gente con más experiencia que tú, que seguramente van a ser más diestros a la hora de hacerla.
Hola, hola. Soy el Dani que ha iniciado este post. Quería agradecer la esclarecedora y pormenorizada respuesta de Hastiado. Y espero que este post resulte de provecho para mucha gente.
Y en cuanto a mis conclusiones: creo que hago algo mal porque siempre que llamo a una productora me dicen que no hacen pruebas. Los que me contestan suelen ser los de RRHH. ¿Sería mejor pedir hablar con el responsable directamente, como cuando te sirven un solomillo de cerdo mal capado? ¿Alguna idea para comunicarme directamente con la “gente guapa” que a lo mejor si que están interesados en leer alguna prueba?
De todas maneras yo, mientras me sigan diciendo que NO, seguiré enviando mis pruebas kamikaze; qué remedio.
Muy interesante post. La verdad es que da consuelo a la gente que estamos empezando en esto. Muchas gracias!
La verdad es que encuentro la respuesta un poco vaga.
Por ejemplo:
“Una buena escena deberá estar bien estructurada, pensada y rematada”
(puedes aportar un ejemplo de escena bien rematada?)
o también :
“hay que estar al día de lo que se está haciendo, de nuevas producciones y productoras punteras, y tirar de conocidos …”
¿Donde te pones al dia sobre producciones?
¿ y si no tienes conocidos dentro del mundillo? lo tendrás chungo. Viva la endogamia.
Y para aprender a escribir guiones, hay que aprender inglés y leerse los guiones de Frasier, que están publicados en la red for educational purposes.
En especial recomiendo el primer episodio de la cuarta temporada “The two mrs. Crane”.
La respuesta no es vaga, es totalmente realista e incluso se lee con dulzura teniendo en cuenta lo negrísimo que está el panorama.
Una buena escena tiene que estar estructurada, pensada y rematada. Si quieres saber cómo se hace, cómprate un manual o hazte un máster. Leyendo o viendo Fraiser puedes aprehender tanto de su guión como mi padre, que es un amante de la serie pero no sabría ni de coña cómo funcionan los chistes que funcionan. Yo llevo estudiando escaleta un montón de tiempo y aún me parece un mundo.
Al día sobre producciones te pones en la amiga internet o donde buenamente puedas. ¿Sabes que los de Notro van a hacer una serie en plan Crepúsculo? ¿Y Bambú, una de las productoras españolas de más calidad, una serie histórica? Pues de eso se trata.
Y en cuanto a “tirar de conocidos”… a eso me refiero con que no es una respuesta vaga, porque en realidad si quieres hacer una prueba una idea NECESITAS conocidos, y aún así lo tienes jodido.
De verdad, no hay fórmulas mágicas, y este post me parece una gran indicación sobre hacia donde hay que tirar la caña de pescar. Pero peces no hay, amigos.
Mi enhorabuena al Hastiado, que siempre está más apegado a la realidad que muchos otros guionistas.
Yo añadiría un concepto que dijo una vez uno de mis profesores: en las pruebas se busca “verdad” en las escenas y los personajes.
Toma vagancia..
La verdad es que me he dejado un consejo en el tintero: efectivamente, siempre hay que intentar que te pongan en contacto con alguien del departamento de guión, nunca con gente de RRHH, que habitualmente no tienen ni idea de si se solicitan, o no, pruebas.
Hmaniaco, te respondo:
– Una explicación de lo que es una escena bien estructurada, pensada y rematada podría ocupar un libro entero, y no es el propósito de este post en concreto. Pero si quiere algún ejemplo, usted mismo ha dado en el clavo: cójase cualquier capítulo de “Frasier” y elija una escena al azar. ESO es lo que está buscando…
– Sólo con leer “Formula TV” o “Vertele” ya se puede estar al tanto de producciones que se preparan. Estoy de acuerdo que un exceso de endogamia puede ser una lacra para cualquier industria, pero tampoco me estaba refiriendo a obscuros contubernios; si usted quiere ser guionista supongo que habrá estudiado en alguna escuela, que habrá asistido a cursos, seminarios, charlas, habrá colaborado en cortos o habrá trabajado en empresas audiovisuales, aunque sea de becario. Sólo con eso seguro que ya conoce a mucha gente que está al tanto del mundillo, aunque sean también gente joven que empieza…
Tomo nota.
Por cierto, me encanta la expresión “obscuros contubernios”. Sobre todo lo de obscuro. Hacia tiempo que no veia esa palabra escrita al estilo clásico.
Y dado el elevado número de comentarios que han suscitado las dos entradas anteriores, quizá deberiamos de dejar de hablar de guiones y debatir si Esperanza Aguirre es guapa o no.
Espero no hablar de más, pero precisamente lo que apuntaba Hastiado en el tercer párrafo de esta respuesta lo he hecho yo. Y los resultados han sido muy dispares:
– Gente que te dice que no hace pruebas.
– Gente que te dice que ahora no puede hacer pruebas, pero que les mandes un CV y, si les gusta, te llamarán cuando las convoquen(y de esos, unos me han llamado para tenerme al tanto y otros no).
– Gente que te dice que ahora no puede hacer pruebas, pero que, en un gesto generoso, TE HACE LA PRUEBA para ver qué tal escribes: este ha sido el germen de mi última prueba, que puedo asegurar que ha sido leída, evaluada, aprobada [¡yuju!], y que, aunque ya sabía que tenían cerrado el cupo, me ha servido para entrar en la reserva.
– Gente que te hace la prueba, y no la pasas.
– Gente que te hace la prueba, la pasas, y entras en la mesa de guionistas.
Luego está lo que pasa a partir de ahí: procesos que se alargan, proyectos que se caen o se posponen… Pero si a mí, que no soy nadie y tengo corto y medio y dos chorradas más, me han dado todas estas respuestas, no creo que sea tan imposible como otros lo pintan.
Una pregunta de alguien totalmente ajeno a la profesión, y por lo tanto sin idea (pero es que me gusta este blog,qué se le va a hacer): si envías pruebas para series, ¿no corres el riesgo de que las utilicen sin tu permiso? ¿sería plagio en tal caso?
Teresa, de todo habrá en la viña del Señor, así que no me atrevo a responder con un “no” categórico. Pero yo he leído un taco de pruebas y nunca he encontrado nada que mereciera la pena plagiar. Porque, además, ¿de qué estamos hablando exactamente? “Plagiar una idea” es un concepto un pelín confuso. Ideas realmente originales ya no quedan, desde los romanos como mínimo. Lo que hay son maneras diferentes y estupendas de desarrollar una serie de ideas más viejas que el hilo negro. Y si yo leo una prueba en la que alguien se ha currado un desarrollo estupendo para una idea, preferiría siempre contratarle que copiarle.
De todas formas, hay gente que registra sus pruebas. A mí me parece innecesario. Si eres una fuente de ideas brillantes y desarrollos portentosos, habrá más de donde salió la que enviaste, ¿no?
¿Cómo se consiguen todos esos contactos sin tener a nadie en la profesión? y ¿cómo puedo enterarme que piden pruebas y en dónde?.
Soy desde los 14 años autodidacta por muchas razones, en especial por falta de dinero para hacer cursos caros y buenos, y hablais del tono, eso no lo he visto en ningún manual. ¿Alguien caritativo puede explicármelo?.
Gracias
Yo creo que merece la pena ahorrar y hacerse un curso. Lo digo desde la barrera, porque yo nunca he hecho ninguno, ¿eh? Pero por lo que cuenta la gente, por lo menos te obliga a escribir (si el curso es bueno) y algo aprendes siempre de lo que hacen los demás.
Lo del tono… pues espero que el señor Hastiado se curre algún día una entrada al respecto, porque es difícil de explicar en frío. A mí sólo se me ocurre un ejemplo, que es el clásico del cuento de hadas. El cuento de hadas tiene un tono concreto, bastante fácil de reconocer cuando te has leído cuatro o cinco, constituido por una mezcla entre los elementos y el estilo. Me explico: uno puede leer un cuento en el que aparece un pájaro y advierte al protagonista: “si tomas el camino de la derecha, el ogro te comerá. Si tomas el camino de la izquierda, el fuego te quemará”. Eso entra dentro del tono del cuento: animalitos que hablan, advertencias, criaturas fantásticas, etc. Pero si en ese mismo cuento apareciera un tornero fresador y le dijera al protagonista: “si tomas el camino de la derecha, te violarán dos fornidos luchadores de sumo”… pues yo diría que está completamente fuera de tono.
Igual es una respuesta un poco de andar por casa, pero es la mejor que se me ocurre a estas horas. Hastiado, anímese a explicarlo mejor, ande.
Para XUNA:
http://pianistaenunburdel.lacoctelera.net/post/2007/06/20/manual-supervivencia-guionistas-11
Buenas,
Quería, en primer lugar, felicitar a Natxo por su magnífico libro. La primera lectura (voy a necesitar releerlo, subrayarlo, consultarlo…) me ha llevado un par de días, únicamente. Es fresco, ameno y ágil.
Por otro lado, yo soy totalmente autodidacta y sin dinero (por ahora) para hacerme un curso “de los buenos”. Viendo que el panorama para dedicarse a esto está bastante negro (desde la ignorancia hablo), yo opté por rodar mi propia serie. Para Internet, capítulos cortos y sencillos de rodar. Dado que tengo un amigo con cierta experiencia dirigiendo y, en mi modesta opinión, bastante talento, decidimos liarnos la manta a la cabeza. Y ahí estamos…
No sé si esto será una buena manera de ir “haciendo callo”, pero como mínimo, nos lo pasamos de miedo.
Saludos
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