58 PREMIOS NO SON NADA

por Sergio Barrejón.

Ayer, Chico Santamano decía que anda como puta por rastrojo y no le daba tiempo a armar un post como Dios manda. Yo ando tan mal de tiempo que AÑORO aquellos rastrojos por los que iba alegremente como puta. Así que imitaré hoy a Chico, si me disculpan, y haré un post de aliño. Un cortapega. Lo que vienen haciendo los diarios nacionales durante los últimos años, vaya. ¡A lo que hemos llegado! Un blog especializado rebajándose a la altura de un diario de pago. En fin…

Lo que voy a contarles me toca de cerca, porque aparte de guionista y director de cortos, también he sido productor ocasional. En 2009, estuve nominado al Goya con un corto que co-escribí y dirigí: EL ENCARGADO.

Si lo hubiera dirigido un año más tarde, no sólo no habría estado nominado: es que ni siquiera me habría podido presentar. Porque tras aquella edición cambiaron las bases de los Goya, y desde entonces sólo podían presentarse cortos que hubieran ganado premios de una selecta lista de festivales… y en unas fechas muy determinadas. Ya hablé del asunto a principios de este año, y no quiero insistirles. Baste con un dato: el corto MARINA, de Álex Montoya, coproducido por un servidor, ganó TRES premios de esa selecta y arbitraria lista… y aun así no pudo presentarse a los Goya. Ni siquiera presentarse. Imagínense lo complicadas que eran las bases.

Este año las han cambiado. A peor, claro. COMO TODO. Bueno, han mejorado algunas cosas… y han empeorado sensiblemente otras. ¿Por qué? Entre otras cosas, porque en la Academia no hay un vocal de Cortometrajes. Y creo que con eso lo digo todo. La tremebunda cantidad de premios y reconocimientos internacionales que reciben cada año los cortos españoles no parecen hacer la más mínima mella en los señores académicos. Por no hacer, ni siquiera invitan a unirse a la Academia a los directores de los cortos galardonados con el Goya. Bien mirado, todo estos errores son previsibles en una institución donde abundan respetables cineastas que no ven cortos, que no entienden los cortos, y que no empezaron su carrera haciendo cortos.

El último damnificado de este desbarajuste lamentable es DULCE, dirigido por Iván Ruiz-Flores. Ha recibido, agárrense, 58 premios por todo el mundo. Es el cortometraje español más premiado de 2011. Pero a la Academia eso se la bufa. No se puede presentar. Vuelva usted mañana. Les dejo con la nota de prensa que ha publicado su productora. Que tengan un buen día.

 

El amargo caso de Dulce

 El cortometraje español más premiado del año, que acumula, desde su estreno el pasado mes de marzo, 150 selecciones y 58 reconocimientos, en su gran mayoría internacionales,no cumple las bases para poder presentar su candidatura a la 26 Edición de los Premios Goya.

 La cinta, escrita y dirigida por Iván Ruiz Flores y producida por AniuR Creativos Audiovisuales, ha sido premiada recientemente por Francis Ford Coppola, y reconocida también por respetados Jurados Internacionales entre los que destacan los nombres de Ridley Scott, Paul Verhoeven, Robert Rodríguez, Miranda Richardson, Charlote Rampling o Rutger Hauer.

 

A pesar de ser Dulce el cortometraje español más premiado en el año 2011, este trabajo no cumple las bases específicas para poder presentar su candidatura a las Premios Goya 2012 para películas de cortometraje.

La injusta situación que atraviesa Dulce y otros tantos trabajos de diferentes autores en similar circunstancia, que tampoco pueden presentar su candidatura, pone en evidencia el desinterés con el que están redactadas las citadas bases, que parecen más encaminadas a que la Academia reciba la mínima cantidad posible de cortometrajes que a valorar la calidad de los trabajos realizados.

 

MODIFICACIONES DEL REGLAMENTO

 Aceptación de cortometrajes en formato digital

La primera gran modificación consiste en la apertura de las presentes bases a cortometrajes en formato digital, medida que desde AniuR aplaudimos.

Entendemos, aunque ni mucho menos compartimos, que esta apertura haya provocado una restricción en las normas. Sin embargo, dicha restricción no puede hacerse, a nuestro juicio, de forma tan improcedente.

 

Selecciones Internacionales

Por ejemplo, en las bases de la edición anterior tan solo era necesaria una selección internacional para poder presentar el trabajo.

El reglamento de las actuales bases, sin embargo, exige haber sido seleccionado o ser ganador de uno de los quince Festivales Internacionales, no celebrados en España, que aparecen publicados en el listado en la página web de la European Film Academy (www.europeanfilmacademy.org).

De un año a otro las exigencias han aumentado considerablemente en lo que a participación internacional se refiere, a la vez que han quedado excluidos un sinfín de Festivales Internacionales de importancia que se celebran dentro y fuera de Europa.

 

Festivales Nacionales

Por otro lado, en las bases de esta edición se mantiene la exigencia de haber participado y ser ganador de uno de los principales premios en el mismo listado de festivales celebrados en España que aparecían en la edición anterior.

 

PARADOJAS QUE EL REGLAMENTO PERMITE

 El citado reglamento permite que un cortometraje que haya ganado tan solo un festival de ámbito autonómico, como, por ejemplo, y no tenemos nada en su contra, el de Cans – incluido en el listado de la Academia de Cine – pueda presentar su candidatura a las Premios Goya 2012 para películas de cortometraje. Mientras tanto Dulce, que atesora más de 50 premios internacionales, y otros trabajos en parecida situación no gozan de ese derecho.

Cabe preguntarse entonces cuál ha sido el criterio con el que se ha elaborado el listado de los Festivales españoles señalados por la Academia de Cine y, sobre todo, cuál ha sido el criterio a la hora de redactar las nuevas bases para películas de cortometraje.

 

 SOLUCIÓN PROPUESTA

 En CARTA ABIERTA a la Junta Directiva de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográfica de España, con fecha 6 de septiembre de 2011, firmada por el guionista, director y productor del cortometraje “Dulce” Iván Ruiz Flores, hemos demandado una respuesta explicativa de la amarga realidad referida en esta nota y  ofrecido en su nombre una propuesta concreta, sencilla y de fácil aplicación.

Opinamos que debería añadirse en las bases un punto en el que se especifique que también podrán presentarse a concurso los trabajos que hayan obtenido un número determinado de premios y/o selecciones nacionales e internacionales, estableciendo el número de premios y/o selecciones que dieran acceso a que el cortometraje pudiera ser inscrito. Esta medida impediría que cortometrajes españoles con una gran trayectoria se quedasen sin el derecho a poder ser presentados.

 

RESPUESTA POR PARTE DE LA ACADEMIA

La respuesta recibida refiere que “La Junta Directiva de la Academia ha estimado que aunque el corto reúne cualidades creativas de gran valor, el reglamento de participación para los Premios Goya, editado y publicado con fecha 7 de junio de este año es muy claro en las condiciones de admisión de trabajos para esta categoría. La búsqueda de criterios objetivos para la selección y sobre todo, el principio de seguridad jurídica, hacen que una vez que la Junta publica las bases de participación, estas deben mantenerse durante todo el proceso, con el fin de permitir a todos los participantes las mismas oportunidades”.

En su misiva La Academia se muestra “receptiva de las sugerencias para ir mejorando cada año los reglamentos de participación”, manifestando a su vez que si tenemos interés en hacerlas, “las estudiará para las ediciones siguientes”.

Respuesta esta que consideramos previsible y triste para el equipo de Dulce y para otros tantos cortometrajistas cuyos trabajos por las mismas razones aquí referidas no serán admitidos para concursar en la XXVI edición de los Premios Goya. La búsqueda de criterios objetivos a la que hace referencia esta respuesta- y que, a nuestro juicio, brilla por su ausencia –  debería haberse tenido en cuenta a la hora de redactar las bases y no en este momento.

Con el deseo de que esta noticia tenga la mayor difusión posible y con la esperanza de una futura mejora en el citado reglamento en beneficio del cortometraje español, sus protagonistas y su público, esta Nota de Prensa la firmamos, de común acuerdo, el equipo del cortometraje Dulce.

 

FIRMADA POR:

 

Pedro Peña, actor.

Fely Manzano, actriz.

Nuria Martinez y Raúl Martín, padres de la actriz Miriam Martín.

Yolanda Reyes, madre del actor Santiago Díaz.

Iván Ruiz Flores, guionista, director y productor.

José Luis Martínez Muñoz, ayudante de dirección

Álex Bolumar, script y montador.

Antonello Novellino (Dpto. de dirección y de producción).

Orisel Gaspar, directora de casting.

Chello Gil, ayudante de casting.

Lolo Moldes, autor de la Banda Sonora Original.

Laura Barbed, directora de producción.

Susana Sánchez, jefa de producción.

Ana Laguarta, directora de arte.

Cristina Bonillo, ayudante de arte.

Mapy Hernández (Dpto. de arte).

Carmelo Barberá, director de fotografía y posproducción.

Pablo Macías, operador de cámara.

José Luis Ruiz Novella, ayudante de cámara.

Nadia Reyes, auxiliar de cámara.

Jano García Prendes, jefe de eléctricos.

Jaime Lardiés, responsable de sonido directo.

Santiago Lorigados, edición y posproducción de sonido.

Jaime Fernández Sánchez, mezclador de sonido.

Almudena Laborda, responsable de vestuario.

Eva Vegas, responsable de maquillaje y peluquería.

 

PARA MÁS INFORMACIÓN, NO DUDÉIS EN CONTACTAR CON NOSOTROS.

AniuR Creativos Audiovisuales

prensa@aniur.es

7 comentarios en «58 PREMIOS NO SON NADA»

  1. Gracias por poner los Cortos. El de los niños ya lo había visto. El segundo no y me ha Encantado.

    Creo que Vergüenza es Poco. A mi me da que no quieren que les quitéis el sitio por eso os tratan tan mal.

  2. Yo es que lo de las bases de los Goya y la de ciertos festivales, que también hay que decirlo, me parece un caso de estrechez de miras, y en algunos casos, de elitismo meramente económico.

    Una cosa que a día de hoy sigo sin entender es que se exijan copias en 35mm para poder participar en determinados festivales (o en sus categorías más importantes).

    El formato de proyección (porque muchos con copia en 35mm ni siquiera se filman en celuloide) no debería ser un condicionante a la hora de seleccionar un corto, más aún cuando hoy día cualquiera puede facilitar un archivo en alta definición para proyectar el corto en condiciones óptimas (sin el deterioro, además, que sufre una copia en 35mm después de viajar por medio mundo de festival en festival).

    Me parece absurdo por lo costoso que resulta hacer una copia en 35mm sin ofrecer, a día de hoy, un resultado mejor que un BluRay o un archivo en HD. Un dinero que supera el coste de muchos cortometrajes o que, en el mejor de los casos, en un corto de gran presupuesto, permitirían derivar ese capital a cosas más prácticas.

    Entiendo que muchos cortos hacen copia en 35mm porque es una exigencia de cara a obtener ciertas ayudas públicas (absurdo igualmente), una copia que suele solicitarse para añadirlos al archivo de la filmoteca.

    Vamos, que en plena era digital, y asumiendo que la calidad nada tiene que ver con la cuantía de un cortometraje (igual que en los largos), me parece que todas estas medidas son un mero filtro para simplificar el trabajo de selección, o bien premiar a quienes más recursos tienen (determinadas escuelas, por ejemplo) sin que eso tenga nada que ver con el hecho de que las historias sean mejores o estén mejor resueltas.

    Comparto la crítica de Sergio, pero a mi entender se queda corta. El problema va mucho más allá de los Goya.

    1. Suscribo tus palabras una por una. Hace algunos años, un corto mío (“Heaven”) fue seleccionado para el Festival de Alcalá y al ir en digital, fue a parar a una sub sección… y a un cuchitril donde había que ir a verlo en unas condiciones pésimas… como todos los que trabajamos en ese formato.

  3. Está claro que es lamentable, pero si lo que quieren es aspirar a los Goya, ¿no bastaría con que enviaran el corto a alguno de los festivales de la lista? Si tanto está arrasando, parece lógico pensar que sería seleccionado en alguno de los internacionales, o podría llevarse algún premio de los nacionales, ¿o no?

  4. Además, en el listado de festivales europeos parece ser que uno ya no existe y otro no admite cortometrajes. Y en el de Cans, sin ir más lejos (y sin nada en contra como se ha dicho) sólo pueden presentarse los nacidos en Galicia, con que no parece que velen demasiado por la igualdad de condiciones ni por la mínima lógica…

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