FIRMAS INVITADAS: LETICIA DOLERA, LA ACTRIZ GUIONISTA

Leticia Dolera nació en Barcelona en 1981. Debutó en televisión con Al Salir de Clase, y ha aparecido en series como Hospital Central, Los Serrano y Guante Blanco. Sus créditos en cine incluyen, entre otras, El Otro Lado de la Cama, De Tu Ventana a la Mía, Man Push Cart, Imago Mortis y Spanish Movie. Próximamente estrenará REC 3. En 2009 debutó como guionista y directora con el corto Lo Siento, Te Quiero, al cual siguió A o B, estrenado en la pasada edición de la Seminci, donde ganó el premio al mejor corto español.

LA ACTRIZ GUIONISTA

Cuando empecé a escribir  “Lo siento, te quiero”,  mi primer corto, lo hice como un ejercicio personal, jamás pensé que lo fuera a rodar, simplemente quería pasar por la experiencia de enfrentarme a una idea y a una página en blanco.

Así que decidí sentarme, al menos una hora al día, frente al ordenador a darle vueltas. La verdad es que resultó ser un ejercicio muy placentero: por un lado me relajaba muchísimo, era casi como meditar  (bueno, confieso: cuando no me salía nada y me ponía a dar vueltas por la casa, no era especialmente relajante) y por otro, encontré en el proceso uno de los motivos por los cuales soy actriz (el motivo principal, vaya) que es el de comunicar. Comunicar sensaciones, pensamientos o emociones a través de las historias, algo que escribiendo o dirigiendo puedes hacer de una manera más personal, mientras que como actriz cuentas la visión del mundo de otra persona.

Recuerdo el día que le mandé a alguien el guión por primera vez, sentí muchísimo pudor y mucho miedo ¿Conocéis el tópico de las actrices de que el desnudo emocional es más duro que el desnudo físico? Bueno, yo no estoy de acuerdo con este tópico, pero sí puedo decir que cuando uno escribe un guión y se lo pasa a alguien para que lo lea, la sensación de desnudo y vértigo es bastante palpable y, aunque da susto, es muy liberadora y bonita.

Pero para mí, el viaje más fuerte es, sin duda, el momento en el que las letras del papel se convierten en voces, aliento y vida.

Alan Moore dice que hacer cine es un acto mágico y yo lo comparto, aunque no corren buenos tiempos para la magia, pero ese es otro tema… Pues bien, creo que toda esa magia empieza en el guión. El guión inspirará al director y conectará con el alma de los actores, que son los que contarán y vivirán esa historia. Como me dijo una vez un director al que admiro: el guión es un trampolín, un lugar desde el cual saltar hacia una historia y todos los miembros creativos del equipo se impulsarán en él, así que más nos vale diseñar bien ese trampolín para que el salto de cada uno de ellos pueda ser más grande. Dado que además es mi productor, procuro hacerle caso, no vaya a ser que deje de producir mis cortos.

Como actriz puedo decir que he interpretado guiones buenos y guiones malos y la diferencia se nota muchísimo. Cuando la historia es interesante, cuando lo que dices y, sobre todo, lo que haces, es interesante e importante para los protagonistas es mucho más fácil actuar. Uno de los mejores directores con los que he trabajado, Ramin Bahrani (“Man Push Cart” “Good bye solo”) me dijo una vez: si esta escena no os sale natural, no es vuestra responsabilidad sino la mía, pues quiere decir que no está bien escrita.  Me impactó muchísimo esa frase, por su verdad y su humildad. Le dimos un par de vueltas a la secuencia, la cambiamos varias veces y al final la rodamos, pero no la montó en la peli. Con ello aprendí que cuando algo ya no está claro en el guión…nunca acaba estándolo en la película.

Supongo que como consecuencia de mi carrera como actriz, procuro tener siempre presente que los actores son los que van a decir el texto que yo vaya a escribir, que en mi ordenador puede parecerme fenomenal, pero que son ellos los que van a tener que encontrar en esas líneas un personaje y una serie de cosas que hacer y decir. Porque el personaje no se encuentra en el pasado emocional que nos podamos llegar a imaginar los actores o en las motivaciones que podamos escribir en una libreta, sino que está (o debería estar) en el guión. El día que descubrí esto como actriz fue una gran liberación. No hace falta escribir libretas y libretas con pensamientos del personaje, lo que hay que hacer es tener un buen guión, sobre eso podrás hacer crecer a tu personaje, sino es imposible.

Los mejores directores con los que he trabajado me han recordado siempre que el guión es una guía. Y con eso no quiero decir que haya que cambiar todos los guiones, ni quitarles valor (¡con lo que cuesta escribirlos!), pero sí es cierto que, en mi opinión y por lo que he vivido a ambos lados de la cámara, hay que dejar que cobren vida a través de los ojos de quienes te ayudan a contarlo. Algo que, debo decir, no me ha pasado muchas veces en mi carrera como actriz y creo que no les ha pasado tampoco a mis compañeros, por desgracia.

Con todo esto en la cabeza, los consejos y las experiencias personales, escribí y dirigí mi segundo corto, AoB. Me resultó relativamente fácil escribirlo, pues nacía de un lugar conocido y tenía muchas ganas de vomitar ciertas cosas. Así que fue casi como una terapia.

Tuve la suerte de poder contar con dos grandes actores Alexandra Jiménez y Diego Martín, en los personajes protagonistas. Recuerdo perfectamente el día de ensayos que tuvimos. La primera hora nos dedicamos a compartir todo lo que el guión y la temática despertaban en nosotros; tras haber comentado experiencias que los tres habíamos vivido, nos lanzamos a una lectura sencilla.

Tras un par de pasadas les pedí que intentasen olvidarse del guión, que sólo pensaran en la escena y se dejasen llevar por la situación y los personajes, que el texto era suyo. De ahí salieron un par o tres de frases geniales, que están en el corto y que me encantan. Algo parecido pasó con la escena en la que el agente (Diego), la jefa de prensa (Bárbara Santa-Cruz) y la recepcionista (Fanny Gautier) acosan a la actriz con todos los planes de futuro que tienen para ella. Había una escena escrita y unos personajes definidos y, partiendo de esa base, nos pusimos a jugar e improvisar. Salieron grandes momentos (o que a mí me parecen grandes y me hacen feliz cada vez que los veo) que serían muy difíciles de escribir en el salón de tu casa, porque hay algo de orgánico y de vivo que los actores, siguiendo la guía del guión, pueden ofrecer a todas las historias para enriquecerlas e impregnarlas también de sí mismos.

Creo que eso es lo que hace grande el arte y a sus artistas, que cada uno de ellos pueda poner algo de sí mismo, genuino y único, en lo que está haciendo. Y gracias a eso, AoB creció en el rodaje.

Esa es la forma en la que me gustaría seguir acercándome a los guiones en un futuro.

Rodaje del corto "AoB".

No me gustaría terminar este post sin hablar de lo bonito que resulta también para mí el montaje. Otros proceso donde se vuelve a escribir la historia y donde puedes  experimentar con cambios en la estructura o con la reescritura de escenas, sólo que en lugar de hacerlo con el Final Draft, lo haces con el Final Cut y con las caras de los actores, cuyas interpretaciones también puedes moldear. (Nota: Lo que me hace pensar en cuánto bien o cuánto mal pueden hacernos los montadores a los actores, ¡ay qué susto!) Como decía, es sin duda otro de mis momentos favoritos del proceso y donde, volviendo a lo mismo, cuanto más alto esté ese trampolín, mejores serán las piruetas.

Evidentemente, no siempre se dan todos estos ingredientes o a veces se dan y el resultado no es el esperado. En cualquier caso, la aventura de crear es para mí, casi como la aventura de crecer y yo espero poder seguir creciendo y aprendiendo de la gente que me rodea, de la actuación y de la creación, para poder seguir disfrutando de las historias y sus personajes. Como actriz, como autora y como espectadora.

16 comentarios en «FIRMAS INVITADAS: LETICIA DOLERA, LA ACTRIZ GUIONISTA»

  1. Muchas gracias por compartir este texto tan bonito con nosotros, Leticia. Siempre es estupendo ver que algunos actores saben más de guión que muchos productores. Ja, ja. Un saludo.

  2. Espero que Leticia tenga un buen futuro como directora. Descubri sus cortos en http://cortometrajes.org página que por cierto recomiendo encarecidamente porque en este pais no se respeta el mundo del cortometraje y creo que esta web esta haciendo un trabajo excepcional.

    Mucha suerte Leticia y suerte a bloguionistas por este gran blog

  3. “La aventura de crear es para mí, casi como la aventura de crecer y yo espero poder seguir creciendo y aprendiendo de la gente que me rodea, de la actuación y de la creación, para poder seguir disfrutando de las historias y sus personajes”.

    Jo, qué chupi.

    1. De hecho, me recuerda a estas chupilolis panolis del Flickr que se creen Frank Cappa por tener una Nikon último modelo.

    2. Intentaré arriesgarme a interpretar: imagino que el “amigo” osito está intentando decir, de malas maneras, que hay gente que, desde su posición, lo tiene más fácil que muchos de nosotros para llevar a cabo sus proyectos. Pues sí, eso es innegable, pero cualquiera de nosotros haría lo mismo si pudiera, y a mí me parece un post con una visión muy correcta del asunto.

      Saludos!

  4. Enhorabuena por el post y por sus éxitos, Leticia. Me ha encantado el corto “A o B”. Está muy logradoy además no despeja los dilemas. El otro me ha resultado un poco más extraño. Supongo que necesito abrir un poco más mi mente..jajaja.

    Kohonera, me alegra muchísimo leerle por aquí. Ya le daba por desaparecido.

  5. Pingback: “ESCRIBIR ME HA HECHO TENER UNA RUTINA QUE ME DA ESTABILIDAD” | Bloguionistas

Los comentarios están cerrados.