por Mercedes Rodrigo.
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Estimados amigos de Bloguionistas:
Me dirijo a vosotros con una consulta muy concreta que espero sea de interés general. Tengo 31 años y desde siempre he querido dedicarme al guión pero por unos motivos u otros nunca he podido. Podría decirse que es mi vocación, ya que llevo escribiendo desde pequeña y lo hago prácticamente a diario, con toda la pasión y entusiasmo del mundo. La cuestión es que mañana mismo dejaría mi trabajo (que no tiene nada que ver con el guión ni con el audiovisual) y me dedicaría a buscarme la vida como guionista, pero encuentro dos problemas:
1) Pese a que escribo mucho, soy consciente de que me falta oficio. He sido autodidacta en lo que a guión se refiere y yo misma soy muy crítica con mis guiones: sé que puedo dar más de mí misma, pero siento que me hace falta una guía, un tutor, que me ayude a mejorar. No sé si habré sobrepasado ya las 1000 páginas, pero cerca debo estar. Y también sé que mala guionista no soy (considero que tengo mucha imaginación y un criterio acertado), pero todavía me queda trabajo por hacer para sentir que puedo optar a un puesto como guionista de ficción. Es decir, en los guiones que escribo veo que hay un buenos puntos de partida, que tengo claros los giros, la estructura, todo en definitiva, pero sé que hay cosas que no funcionan, y me faltan conocimientos y experiencia para determinar qué es exactamente lo que falla y cómo mejorarlo.
2) No poseo ningún tipo de contacto con el mundo guionístico, ni por asomo tengo acceso a la “pomada” y más aún, vivo en un pueblo, lo cual dificulta remotas posibilidades de conocer a tal o a cuál. Ya sé que los contactos no sirven de nada si no hay materia prima, pero si la hay, ¡qué valiosos son!
En definitiva, me estoy planteando dejarlo todo y ponerme a estudiar guión en una escuela o máster, como he dicho, para adquirir conocimientos (callo y oficio), y para hacer contactos. Y he aquí mi cuestión: ¿es muy tarde para mí? Partiendo del supuesto de que yo realmente sea buena guionista, o que pueda llegar a serlo, ¿tendré posibilidades de que me contraten en algún lado o me tirarán el currículum a la cara por considerarme demasiado “vieja”?
Me preocupa mucho este asunto ya que una cosa sería no encontrar trabajo como guionista por no ser lo suficientemente buena, y otra muy distinta, no encontrarlo por no encajar en el perfil de guionista junior (porque deduzco que es el puesto al que puedes optar al acabar los estudios, si tienes suerte, y me imagino que será tras las obligadas prácticas).
Amigos Bloguionistas, ¿debo tener esperanzas? ¿La edad es determinante para comenzar en este oficio?
Muchas gracias por vuestra atención.
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Estimada futura compañera:
No creo que la edad sea excluyente para comenzar una carrera de guionista.
Sobre todo porque es un trabajo mental. Y para eso, siempre y cuando no estés aquejado de demencia senil, no hay edad.
Tampoco se requiere un cuerpo joven ni flexible.
Por el momento no se requiere ninguna característica física específica. Aunque siempre es práctico estar dotada de unas buenas posaderas que te ayuden a sobrellevar largas jornadas clavada en una silla y sin apartar la vista del ordenador.
En serio: Los que vayan a contratarte valorarán la originalidad de las tramas, la solidez de los personajes, la agilidad que tengas para crear situaciones o idear soluciones, la habilidad de la estructura, lo bien que encajes en un equipo o el compromiso que tengas para entregar el trabajo necesario en el momento requerido.
Lo demás es secundario. Al menos así lo veo desde mi experiencia.
Normalmente, y más si no tienes experiencia laboral, se accede a un puesto de guionista a través de una prueba.
Y en esa prueba es muy probable que quede patente tu falta de oficio pero también quedará reflejado tu presunto talento y tus habilidades.
Puede ser que, si el coordinador duda entre varias pruebas, sea determinante la experiencia laboral de los candidatos.
Puede ser que no quieran contratar a nadie sin experiencia previa en un tipo de formato específico.
Pero también puedes encontrarte con un equipo que necesite un integrante más de refuerzo y decidan contratarte como “junior” o becaria o guionista de plató o algo por el estilo.
No sé si el callo que notas que te falta podrás adquirirlo en algún curso o máster.
Creo que es como en cualquier otro oficio: hasta que no te pones a trabajar no pillas callo. Sólo entonces podrás congratularte de sentirte más segura en tu oficio, pero en ningún caso tendrás garantías de poder encadenar un trabajo con otro. Eso es más cuestión de suerte.
Yo sigo teniendo la sensación de que aunque acumules cuatro o cinco líneas de experiencia (y poniéndome pesimista, hasta un goya) en tu currículo, vuelves a empezar de cero cuando sales a buscar trabajo.
Porque igualmente van a hacerte una prueba y van a tratar de pagarte lo menos posible en la mayoría de las ocasiones.
La del guionista es una carrera de fondo. La capacidad de trabajo y la resistencia son tan importantes como estar en el lugar preciso y en el momento exacto para enterarte de las pruebas que te interesen y currártelas al máximo.
En esta carrera, el trabajo duro y la experiencia otorgan beneficios a largo plazo en lo que a ofertas de empleo se refiere.
La combinación que planteas de máster + prácticas + guionista “junior” puede ser la más segura, pero no es la única. Y, si reviso mi entorno, ni siquiera es la mayoritaria.
Si me paro a pensar en cómo empezaron su carrera los colegas de profesión que conozco, sólo puedo concluir que hay miles de caminos para empezar a trabajar. Algunos muy curiosos.
Muchos se han incorporado al mundo del guión desde otros departamentos del audiovisual, como puedan ser producción o dirección. Algunos eran jóvenes cuando empezaron y otros no.
Otra gran cantidad de compañeros vienen del periodismo.
Yo misma estudié teatro y empecé a trabajar gracias a que unos guionistas, clientes del restaurante de mi hermano, me avisaron de un par de pruebas.
También hay compañeros que antes de ser guionistas (o durante) trabajaban como economistas, filólogos, profesores de instituto, informáticos o incluso buzos.
Éste es mi caso favorito, el de una compañera que era buzo especialista en un programa de televisión.
Tiempo después era azafata de vuelo y en uno de sus vuelos se reencontró con el director del programa donde trabajó como buzo especialista. Este director recordaba el interés de la buzo por el mundo del guión y, como en ese momento estaba buscando guionistas para una serie, le envió una prueba.
Y así, sumando a esta oportunidad su gran talento y su indispensable capacidad de trabajo, empezó una estupenda carrera de guionista. Y ahí sigue.
Ya ves: aquí, como en botica, hay un poco de todo.
Conozco gente que lleva toda la vida trabajando de guionista y que ahora no encuentra nada, y gente que acaba de empezar en esto y compaginan dos series.
Otros compañeros han conseguido su primer trabajo de guionista con más edad que tú. Y se da el caso que alguno de ellos se vio coordinando –y con gran profesionalidad- al equipo de guionistas de la serie en la que él mismo entró sin apenas experiencia, en menos de dos años.
Está claro que la experiencia te da cierta tranquilidad y cierto prestigio, pero la edad no va a ser excluyente. Como mucho lo tendrás más difícil, pero imposible no es.
Duro con ello.
Yo te recomiendo que te afilies al sindicato ALMA y estés pendiente de su página web. En el sindicato puedes contar con asesoramiento legal. Pero lo más atractivo es que organizan actividades y cursos (muchos de ellos gratuitos o con importantes descuentos) que vienen muy bien para ampliar formación y darte a conocer.
Conocer a gente del gremio no sólo es esencial para contar con contactos valiosísimos que puedan avisarte si se enteran de alguna prueba de guión. También te da la oportunidad de encontrarte con guionistas y aspirantes con los que emprender proyectos y ampliar tus conocimientos y habilidades.
En esta carrera puedes tirar por muchos caminos.
Yo, gracias a mis compañeros, he dado pasos y he emprendido proyectos que, de otra manera, no se me habrían pasado por la cabeza.
Al final, tener treinta años es tan irrelevante como tener el pelo ondulado. Al coordinador y a tus compañeros de equipo sólo les va a interesar que entregues buenos trabajos.
Hay diferentes perfiles y todos tienen su sitio. Acabarás encontrando el tuyo.
Por cierto, si te enteras de alguna prueba, avísame.
Mucho ánimo y mucha suerte.
Cuando fui al Seminario de Mckee en Málaga, conocí un portero de discoteca/guionista. El tipo estaba como el Conán; tenía músculos hasta en los dientes. Lo cual no viene nada mal para que se lo piensen antes de que te hagan alguna mala jugada
Suscribo todos los consejos de este gran post.
Le diría a la futura compañera de que no deje de escribir proyectos propios, a menudo es ahí dónde más se aprende. Que escriba un guión de largo y pida opiniones acreditadas. Que lo rescriba sin descanso hasta que piense que tiene algo que está bien. Que, por ejemplo, lo presente a algún concurso de guión de los muchos que hay en España. Son anónimos y nadie del jurado va a mirar su edad y experiencia.
Aunque no gane ningún premio habrá obtenido experiencia y oficio. Aunque tenga la suerte de ganar o conseguir una mención en dicho concruso tampoco por eso va a conseguir trabajo. Pero al menos tendrá una línea más en su CV.
Y a la vez que hace todo esto podría estudiar cursos e intentar hacer pruebas de guión.
Pero si quiere ser guionista lo más importante es tener una ética de trabajo. Dedicar todos los días aunque sea una hora a un proyecto personal que realmente te apasione es muy importante.
Y si tu trabajo actual, aunque no te guste, te lo permite piensa que tienes suerte. Cuando yo estaba en esa situación me planteaba que tenía una beca para escribir. Lo único que tenía que hacer a cambio era estar ocho horas en una oficina y aguantar al mamón de mi jefe.
Suerte.
Desde luego, que una pimpolla de 31 años se pregunte si es vieja no deja de demostrar el nivel de imbecilidad del mensaje con que nos bombardean medios, políticos, vallas publicitarias, experimentos sociales televisivos y demás esputos del entertainment nacional.
Si uno hace demasiado caso a la tele y, a veces, a la manada de idiotas que sin remedio se tiene que cruzar cada día, llega a la conclusión de que si no tienes 22 años, buena presencia y ‘un futuro brillante’ ante ti, ya no tienes que hacer nada en esta vida.
A la futura guionista que ha enviado la carta le diría que yo, que tengo 42 tacos, me voy a ir pronto a otro país, a otro continente, para ser exactos, a empezar una nueva vida que jamás hubiese imaginado. Tan sólo hay que quererlo y acto seguido hacerlo, por ése orden, amiga. Haz mucho caso de lo que te dice Mercedes Rodríguez. Y si por el camino te encuentras a alguien que piensa que eres vieja, compadécele su falta de luces, por aquí me entra, por aquí me sale y a otra cosa.
Mucha suerte.
¿31, vieja? Por Dios, estás en la flor de la vida. Aún te quedan 9 años para llegar a la edad que en la que el islam se considera que comienza la vida adulta. Eres una chavala. Si te sirve de ánimo yo no comencé a escribir guiones hasta muy cerca de los 30, y los primeros eran vídeos industriales y promocionales (mi primera “obra maestra” es sobre montaje de ventanas de PVC). Ya ves… y ahora vivo de esto.
Hay un ejemplo que me gusta mucho. La música está llena de niños prodigios y de compositores que comenzaron a componer y destacaron muy jóvenes. Pero Ralph Vaughan Williams no compuso nada hasta pasados los 30 y pico años, y no fue hasta los 40 que tuvo algo de éxito. Luego desarrollo una de las carreras más fabulosas y extraordinarias del siglo XX, hasta el punto de que son muchos los que le consideran el músico británico más importante del siglo XX.
NUNCA es tarde. Y los 30 mucho menos. Ánimo y adelante, y haz mucho caso a todos los excelentes consejos que ten dan en este post.
Y, también, sé muy autocrítica y muy abierta a todo lo que te digan. Intenta llevarte bien con tus futuros compañeros y que sea una gozada trabajar contigo. No sólo se trata de hacer tu obra o de expresarte, se trata de trabajar en equipo, de ser parte de un engranaje. Es cuestión de talento, trabajo, experiencia y mano izquierda.
Lo dicho, mucho ánimo y mucha suerte.
No sé por qué te llaman futura guionista: tú ya eres guionista.
El matiz, si acaso, es que ninguno de tus guiones se ha rodado ni tú has cobrado nada por ellos. Pero guionista eres desde que los acabaste, incluso desde que te propusiste escribirlos. Eso es lo que te distingue de los que nunca se lo han planteado.
Tienes la determinación y la sensatez necesarias. La valoración que otros hagan de tu talento es, irónicamente, algo secundario. No te quedes con la espina de no intentarlo siquiera, porque (sobre todo) nos arrepentimos de aquello que no hicimos.
Nunca es tarde para empezar! No importa la edad biológica sino nuestra edad interna. Conozco gente de 20 años que parecen de 50. Adelante!!!!!
Ser guionista es como ser socio del Athletic, no hay edad límite y acabarás sufriendo un poco.
O como ir a un restaurante Tandoori y pedirte lo más picante. :D
Como aspirante a guionista profesional de 34 añazos, te recomiendo que lo intentes si ese es tu empeño, pero intenta compaginarlo primero con tu actual trabajo no sea que te quedes sin ninguno de los dos.
Una pregunta que me ha rondado la cabeza varias veces, y que ahora veo respondida. Me alegra ver que la edad no parece un impedimento para este trabajo (yo también estoy en la treintena)
Por cierto, una pregunta para Mercedes. Recomiendas afiliarte a ALMA, opción que me he planteado. Pero, ¿te refieres a afiliarte sin estar trabajando en el sector, desde ya?
Hola Jorge:
Yo me afilié en cuanto empecé a trabajar y cuando me quedé en el paro me vino muy bien. Como tenía muy poca experiencia me dejaron pagar la cuota de aspirante, porque antes existían dos cuotas, una para profesionales y otra más económica. No sé si esto sigue siendo así pero por lo que he visto en la web parece que ahora solo hay una cuota. Si te lo puedes permitir, adelante. Yo me pondría en contacto con ALMA y ellos te aconsejarán.
Hola Mercedes:
Gracias por la respuesta. He estado informándome, y hay algunas cosas que me resultan bastante interesantes. El tema es que, al igual que la lectora anónima que envió la carta, mi trabajo actual tampoco tiene nada que ver con el gremio, y no sé hasta qué punto puede resultarme de utilidad ahora mismo. Quitando, por supuesto, los descuentos en cursos y ese tipo de cosas.
Saludos, y gracias otra vez.
Me ha gustado mucho el Post. Nunca se es viejo para nada, ni siquiera para morir!
Jajajaj! Me has dejado muy tranquilo, de verdad. Un saludo muy cordial.
Este ha sido un año terrible, han muerto cinco personas que conocí personalmente, algunos eran todavía muy jóvenes, sobre todo de espíritu. Si no me hubieses saludado cordialmente me hubiese tomado a mal tu comentario, así que Gracias colega.
Hortensia, perdóname. Ya sabes que por escrito uno nunca sabe en qué tono se dicen las cosas. Lo siento mucho si te he ofendido.
Hay muchos grandes personajes que se dedicaron a esa edad al oficio por el que ahora son conocidos: Zhang Yimou, Van Gogh, Hitler, uno de los mejores fotógrafos actuales del mundo cuyo nombre no recuerdo…
¿Hitler? ¿Qué oficio? ¿El de pintor? ¿El de matarife? Valiente comentario inútil.
No tengo la culpa que no vea mérito en que un vagabundo de las calles de Viena se convirtiese en uno de los hombres más poderosos del siglo XX. Retiro el ejemplo inmediatamente. Ya pasó, ya pasó.
Muchas gracias, Mercedes. Soy la autora de la carta y quería transmitirte lo mucho que me están ayudando tus reflexiones, y gracias también a los ánimos de los comments. Un abrazo.
No hay de qué, me alegro mucho. Otro abrazo para ti.
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