por Curro Royo.
Dejemos sentada de entrada una cosa: sobre gustos, no hay nada escrito. Si se está de acuerdo con esta afirmación, podemos seguir adelante. Si no… mal vamos.
¿Por qué comienzo de esta forma? Porque voy a hablar de una experiencia individual y subjetiva sobre la que me siento absolutamente soberano y dogmático, esto es, mi relación con Lost. Al igual que muchos otros soy… o era, fanático de Lost. He pasado horas y horas fascinado delante de la televisión y del ordenador disfrutando de la que para mí era la mejor serie de la historia de la televisión.
¿Lo era?
Para mí lo fue, durante años . Y lo fue por la sencilla razón de que era la única serie, que vez tras vez, al acabar cada capítulo, me dejaba con la boca abierta y preguntándome… “¿Y ahora qué va a pasar?”
Cuando trabajas en esto del guión, te aperreas. Te vuelves cínico. Aprendes a disimular tu envidia disfrazándola de diletantismo. Desprecias lo que funciona porque funciona, y lo que no funciona porque no es capaz de captar al público. Pero amigo, ante el genio en estado puro, ante el valor y el riesgo, sí… el riesgo de lanzarse al vacío y lanzarte a ti con la historia… ante eso, te callas y deseas que la siguiente temporada llegue cuanto antes.
Y es que eso es lo que me ocurría a mí con Lost. No tenía límite, no tenía techo. Cada vez que tocaba un capítulo de Desmond, me preparaba para cualquier cosa. En mi lista de los mejores capítulos de la historia de la televisión, estará por siempre “The Constant”. En mi repertorio de frases míticas, siempre tendrá un lugar de honor el “Hay que mover la isla” ¿Han dicho mover la isla? Sí… y no sólo lo dijeron. Lo hicieron. Con un par.
Ahora bien… y a partir de aquí empezamos a pisar otro terreno, toda mi fascinación residía en un pacto que siento, básicamente, incumplido. El pacto al que me refiero es la base de lo que Samuel Taylor Coleridge denominó suspension of disbelief.
La ficción se sustenta en un pacto implícito entre el narrador y el receptor de la narración, mediante el cual el receptor accede voluntariamente a tomar por real lo que sabe que es falso, para así poder adentrarse en el mundo de la narración y seguir su lógica. Gracias a este maravilloso mecanismo, ya de niños, podemos disfrutar del teatro de guiñol aunque sepamos que la princesa y el dragón son trozos de trapo manejados por una mano. Es el mismo mecanismo que luego nos hace capaces de creer que Superman vuela, que la sangre que sale por las heridas de las víctimas de Dexter es sangre y no tomate, o que Bill Compton morirá irremediablemente si intenta salvar la vida de Sookie Stackhouse a plena luz del día. No es que no sepamos que todo es mentira, no… es que hemos decidido voluntariamente creerlo, hemos rebajado el nivel de nuestro descreimiento para acceder a una realidad superior e inmaterial llamada ficción.
Ahora bien, como todo pacto que se precie, éste también posee sus cláusulas, y algunas son de obligado cumplimiento. La primera y más importante es “No aburrirás a tu público”. Si aburres, la magia se rompe. El espectador es capaz de mirar la historia desde fuera, comienza a sentirla ajena, levanta de nuevo las barreras que separan a la realidad de la ficción y termina sentenciando un “no me lo creo” que es el preludio del abandono de la sala o el cambio de canal.
La segunda cláusula es “No harás cualquier cosa con tal de no aburrir a tu público”. Para mí, Lost cumplió a la perfección la primera cláusula antes mencionada, durante cuatro temporadas. Lo hizo mejor que ninguna otra serie que yo haya visto hasta la fecha. En las dos últimas, ha demostrado un catastrófico incumplimiento de la segunda, invalidando por tanto el cumplimiento global del pacto.
Si semana tras semana yo sentía vértigo ante lo que me mostraban, ante los giros, ante su arrojo y su valor… era porque presuponía que los responsables de la serie sabían adónde me estaban llevando. Era tanto lo que mostraban, que me estremecía pensar en lo que quedaba por mostrar, lo que ellos ya sabían pero yo todavía no. Si alguien me decía… “Ah, Perdidos… es esa de la isla ¿verdad?” Yo respondía que sí, que era la de la isla, pero que la isla era el protagonista principal de la trama, un protagonista con una personalidad fascinante y una historia que me iban mostrando poco a poco. Yo respondía… “Es la de la isla ¿y sabes qué? Después de cuatro temporadas, aún no sabemos realmente qué es la isla”.
Seis temporadas después, seguimos sin saberlo. Y a eso yo no lo llamo “metáfora”, o “libertad creativa”. Yo lo llamo timo.
Supongo que podríamos estar horas repasando preguntas no respondidas, incoherencias, contradicciones… Yo sólo aludiré a una que me duele particularmente como guionista, por lo que tiene de torpe, de mala práctica profesional, de chapuza: y es el haber escamoteado las respuestas básicas con respuestas que sólo planteaban otras preguntas nunca respondidas.
Tomemos por ejemplo el caso del enigmático monstruo, el humo negro ¿Qué era? Muy fácil… el humo negro, era un ser humano transformado por haber caído por un túnel lleno de luz. Muy bien, pero… ¿qué había al final del túnel? Luz, por supuesto. Es verdad, vaya pregunta… pero oiga… ¿qué era la luz? No me fastidie, ¿es que no lo ha visto usted al final? Era una luz que llenaba una especie de piscina con un agujero muy grande tapado con una piedra llena de jeroglíficos. Ahora sí que lo entiendo… pero, y perdone que sea un poco puntilloso… ¿a quién le importaba que esa agua y esa luz se fueran por el agujero? A todos, porque esa luz era muy importante… ¿Pero por qué? Porque así lo dijo la madre adoptiva de Jacob y de su hermano, una señora tan encantadora que por el bien de la humanidad no dudó en hundirle la cabeza con una piedra a una recién parida. Bueno, pero a lo que vamos… esa señora que le dio a Jacob y a su hermano las claves de lo que la isla encerraba… vendría de algún sitio… ¿De dónde va a venir? De fuera de la isla, como todos ¿Y entonces quién le contó a ella cuál era su misión? Señor mío, qué pesado se pone usted…. un poquito de lógica. A esa señora se lo explicó todo… el que estaba antes.
Está bien, me callo, no hago más preguntas. He seguido fielmente su serie, la he defendido a capa y espada, sí… Pero, por favor, se lo pido por favor, antes de que acabe la serie, dígame, aunque sea muy bajito, y así entre nosotros… ¿Qué es la isla?
Se lo diré si responde a lo siguiente: “¿Cuál es la respuesta a esta pregunta?”.
Me gustaría terminar con una mención al remate final de la trama paralela de la sexta temporada, que situaba a los personajes en un mundo en el que el accidente no había terminado, un mundo paralelo que al final se muestra falso, ya que los personajes están muertos, aunque no lo saben.
En la frágil red narrativa del mundo de la serie, todo lo ocurrido en la isla ha sido real. Lo que hemos visto no era un sueño, no ha ocurrido sólo en la mente de los protagonistas, como muchos se temían. Esta trama paralela de la sexta temporada es un añadido, una coda que sirve para compensar a los protagonistas de tantos sufrimientos, desgracias y saltos de tiempo. Queremos a los protagonistas, los conocemos, y agradecemos que los creadores organicen una fiesta de despedida con todos ellos, fiesta que termina con el prometedor anuncio de un viaje fin de curso a un sitio con más luz. Algunos bloguionistas como David Muñoz o Chico Santamano denuncian, creo que acertadamente, un misticismo simplón, una religiosidad difusa bajo la cual, todo vale.
De entrada, la serie podría haber terminado con la muerte de todos los protagonistas sin que de esa muerte se dedujera lógicamente ése final de foto fin de curso. Ni están todos los que son, ni son todos lo que están. Puestos a pasar lista, y dado el carácter pretendidamente religioso del final, echo en falta a ese maravilloso traficante reconvertido en sacerdote y convertido interiormente que fue Mr Eko. Eso por no hablar de propio Jacob, que habría sido el cicerone natural de todo este grupo de personas, a las que se supone que fue eligiendo. Pero mejor no empecemos a tirar del hilo, porque está todo cogido con unas pinzas muy mal escogidas y colocadas.
Tal vez lo que más me indigna de ése final es que para tapar el último agujero de la serie se haya escogido una apariencia de religiosidad, como si ésta fuera sinónimo de respuesta a medias, una vaga realidad que nuevamente sirve de coartada a la impericia de los guionistas. Como admito abiertamente a amigos y colegas, soy creyente. Lo soy, por razones concretas que puedo explicar a cualquiera tomando un café. Creo en una vida después de la vida. No puedo demostrárselo a nadie, entre otras cosas porque todavía no ha sucedido, porque no me ha sucedido. Entra dentro de mi razonamiento la posibilidad de que me equivoque, por supuesto, pero en todo caso es sólo cuestión de tiempo. Pero la posibilidad de ésa vida, tal cual yo creo en ella, descansa en la previa y necesaria posibilidad de la existencia de alguien que la justifique y le dé una base lógica, esto es, Dios. Por lo menos, digo yo, es coherente. Todo es verdad o es una completa ilusión digamos… en bloque.
Precisamente al contrario que lo que ocurre en la serie. No hay nada en la isla, en su pretendido poder, fuerza, destino, etc, que justifique que los personajes sigan un camino postmortem como grupo. De acuerdo a lo oído en el capítulo, dicho por boca de un personaje retomado a última hora, están juntos para “poder recordar” y “porque lo más importante que les ha ocurrido es conocerse estar juntos”. A efectos de pura lógica narrativa, podrían haber estado veinte años juntos dando vueltas en una noria de Disneylandia y habrían acabado de la misma forma.
Es este no llegar a ningún sitio, este no apostar por una explicación clara, una… la que fuera, la que ha terminado minando la coherencia de la serie. Hay puntos de apoyo que mueven mundos. La ausencia de ellos hace que esos mundos se salgan irremediablemente de su órbita y terminen siendo engullidos por un agujero negro.
Al final, está claro que nadie puede contar lo que no sabe, ni explicar lo que no entiende. Tal vez puede apuntar hacia lo que intuye, pero ésa es una base muy endeble para mantener la atención de millones de personas en todo el mundo. Durante años acallamos las voces de los que decían que la serie no tenía mucho sentido. Lo hicimos porque nuestra firma estaba al pie de un contrato por el cual entregábamos nuestro tiempo y entusiasmo a cambio de diversión y el placer de una historia bien contada. Personalmente no esperaba una Revelación. Sólo se trataba de una serie de televisión, la mejor de la historia… hasta que dejó de serlo.
Pero como he empezado diciendo: sobre gustos y disgustos, no hay nada escrito.
La premisa es tan endeble que invalida lo demás.
La mejor seríe de la historia de la televisión??????
Para mí lo fue, durante años . Y lo fue por la sencilla razón de que era la única serie, que vez tras vez, al acabar cada capítulo, me dejaba con la boca abierta y preguntándome… “¿Y ahora qué va a pasar?”
Argumento flojo para considerarla la mejor serie de la historia de la televisión.
Evidentemente, hay dos tipos de espectadores de Lost. Los que pensaban que la isla era el centro de la serie y los que pensaban que eran los personajes. A mí siempre me ha parecido evidente que lo importante eran los personajes, de ahí que los flashbacks fuesen lo mejor desde el principio, y los ganchos, gimmicks y demás elementos necesarios para mantener la atención del espectador no fueran más que una especie de mcguffin enrevesado que, ya desde la primera temporada, se veía que los responsables de la serie no se tomaban demasiado en serio. Yo siempre me tomé esa isla como una especie de prueba que los personajes debían superar para llegar a no sabía qué sitio.
En mi opinión la serie ha sido demasiado larga (4 temporadas hubieran bastado) y, sí, hay demasiados elementos que no conducen realmente a nada, pero yo veo Lost de esta manera: trata sobre un grupo de personajes que al principio de la historia lo han perdido todo y que a través de su particular viaje consiguen no sólo reencontrase consigo mismos, sino también tener la experiencia más importante de sus vidas. Al final, además, conseguirán un lugar atemporal en el que encontrarse y en el que recordar ese momento, destacando la importancia de la gente que te rodea a la hora de encontrar tu destino. Yo creo que esa sensación se respira en los personajes desde la primera temporada.
Es probable que el halo misticoide de la sexta temporada tire un poco de espaldas, que no todo esté perfectamente ligado (¿alguien realmente pensaba que eso era posible?), y que haya incógnitas que muchos esperaban ver resueltas pero que aún siguen en el aire (creo que eso beneficia al mito, cosa hecha aposta), pero a mí me ha gustado la resolución de la serie. Quizás, precisamente, porque no ha contestado todas esas preguntas que la mayoría esperaba ver resueltas y que, en mi opinión, eran secundarias.
¿Qué es la isla? Es una pregunta difícil de explicar, del mismo modo que son difíciles de explicar los argumentos de las películas de David Lynch, pero más o menos, y en función de lo que cada uno crea sienta al ver la serie, podemos hacernos una idea. ¿Cuál es la función dramática de la isla? Pues probablemente sea la prueba que el protagonista tiene que superar para reencontrase consigo mismo. ¿Muy poco para una serie tan larga? Quizás, pero ha mantenido a los que la seguían enganchados hasta el final. Y quizás sea eso lo más importante en una serie de televisión.
¿La premisa no era “sobre gustos, no hay nada escrito”?
El pacto como dices es individual y cada uno espera su propio desarrollo y su propio final, pero el más acertado es sin duda el que nos dan ellos. No comparto tus argumentos aunque son razonables. Lo que no me parece razonable es indignarse. No sé, si yo tuviera a Lindelof y Cuse en la puerta de casa no les driría que estoy indignado con su trabajo, con su obra y con el final de Lost. Les diría que pasen se sienten y se tomen un café y que me cuenten que nuevas ideas tienen en la cabeza. Lo otro sería como indignarse con Leonardo porque la máquina de volar no le quedo niquelada.
Oh yeah!
“Creo en una vida después de la vida. (…) Pero la posibilidad de ésa vida, tal cual yo creo en ella, descansa en la previa y necesaria posibilidad de la existencia de alguien que la justifique y le dé una base lógica, esto es, Dios. Por lo menos, digo yo, es coherente.”
Podías haber empezado así el artículo, mostrando tu concepto de “coherencia”, y me hubiese ahorrado leer el resto.
Sé que mucha gente estaba muy enganchada a Lost y que el final ha sido (sorpresa sorpresa) bastante polémico, así que comprendo perfectamente el atracón de catarsis, pero así por curiosidad, ¿cuándo volvemos a la programación habitual?
“atracón de catarsis” jajajaj Muy bueno!
una caja de pandora. La isla es el tapon que sujeta todas las fuerzas malignas del mundo.
Lo explica Jacob con una botella de vino como ejemplo.
Lo que pasa es que nos han ido desvelando misterios a lo largo de toda la temporada y a algunos les han pasado inadvertidos…
muchas de las cosas que pasan en la isla son teorias de fisica cuantica. Está claro que no todos los espectadores entienden de eso… fisica cuántica! yo misma ni idea, pero he leído algo a raíz de esto y es de lo mas interesante!
En fin… que hoy parece una obligacion haber seguido Lost. Quien no la ha visto está diciendo “a mi que no me enganchó… tendré que volver a verla!” y para qué digo yo? si no te enganchó no te fuerces. Cada cosa tiene su público. Lo malo de la televisión es que siempre aspira a tener un publico familiar y no es posible.
Es cierto que quedan algunas dudas sin responder… pero siempre ha pasado, no?
Quiero decir, dónde está la Tierra Media? Como empezaron sus pobladores? tambien vivieron un big ban o salieron de una costilla?
no sé… como dice bien el artículo entendemos que es ficción y no se le puede exigir realismo en todo (si no para eso no veas ficción, ves un documental y listos).
Para mi, que no creo en seres superiores y que creo que cuando morimos morimos… es un final bonito, me gusta la idea de tener esa esperanza cuando mueres. Entiendo que a los que ya la tienen de toda la vida eso les parezca de lo mas vulgar, pero a los descreidos nos parece magia!
Por otro lado, qué miedo, qué vértigo como guionista escribir algo con tanto éxito que crea unas espectativas tan desmesuradas. Es imposible contentar a todos…
Efectivamente, la premisa es “sobre gustos no hay nada escrito”, entonces pa qué escribir?
No, no quiero ser tan negativo. Lost es una serie muy especial, pero quien la siguiera casi en tiempo real sabe que a partir de la tercera temporada el grado de dispersión de las tramas era casi surrealista.
Es una serie de personajes y emociones. The Constant es tan cojonuda porque es emoción pura y dura. La ciencia ficción de la serie es de pacotilla, tanto argumental como técnicamente.
Lost es un melodrama. Qué es la isla? qué es el monolito de 2001? A mí no me importa.
Uy, el monolito de 2001 es otra prueba, la que el creador o una inteligencia superior ha dejado ahí esperando en próximo paso en la evolución humana. xD
Hablando en serio, comparto plenamente lo que dices.
Sobre lo de que es una serie de personajes se me plantea una duda: ¿hay alguna serie que no sea de personajes?
Por definición, las series se sustentan en sus personajes, que son la constante (Dios, otra referencia a Lost), que atraviesan por diversas tramas, que es la parte variable. Ninguna serie sin personajes potentes permanece en el tiempo.
Por otra parte, la mayor parte de las series se conciben para durar en el tiempo; es decir, eludir el final. No tienen final. Todo final es postizo, antinatural.
Lost tiene algunos de los personajes más memorables de la televisión reciente que explican su éxito y ha tenido un final eutanásico (¿existe esa palabra?), antinatural, como casi todas.
En realidad sí explican lo que es la isla. Lo que ocurre es que no de la manera en que se parecía prometer al comienzo de la serie. Imaginemos que viéramos el episodio de “Across the ocean” sin haber visto nada de la serie. ¿Nos preguntaríamos qué es esa luz? No. Simplemente aceptaríamos lo que la madre adoptiva dice: que es lo mejor de cada persona etc Es el bien, la vida… Lo que sea. Y aceptaríamos el relato como una historia con gran carga mítica o simbólica. Al igual que yo que sé, “Legend” o “El señor de los Anillos”. Y es que cuadras los diferentes géneros que ha sido “Lost” a lo largo del las diferentes temporadas (drama, ciencia ficción, parábola mítico-religiosa o lo que sea que haya sido la sexta) ha sido probablemente el experimento más arriesgado de todos.
Yo estoy también muy mosqueado con la serie. Pero por motivos diferentes. No soy creyente. Pero muchas películas o relatos que defienden cierta idea de trascendencia me emocionan o me llegan. Pero este final me ha parecido demencial. Y la filosofía de la serie (que es lo que creo que realmente importaba a sus creadores) muy negativa. A saber, que el hombre no es libre sino es para seguir un destino que le viene marcado desde fuera y que la felicidad no es posible en este valle de lágrimas que es la tierra/la isla, sino sólo en la “otra vida”. Y si repasamos las diferentes peripecias de los personajes (en especial Locke y Jack) y cómo acaban creo que estaremos de acuerdo en que nos encontramos ante una de las ficciones más sádicas de la historia.
Amén, Bro. Estoy contigo, aunque siempre hay que agradecer. Sólo por el capítulo de “The constant” y “Exposé” ha merecido la pena. Y por los personajes de Desmond, Hurley, Sayer?? y, claro está, Mr. Ecko. Fue tan bonito mientras duró
Me he perdido todos los capítulos, ésta es mi opinión desde el desconocimiento de la serie, la isla y sus personajes, tras leer las dos entradas del blog:
Os ha entretenido capítulo a capítulo (Bien),
ha dado que hablar en las reuniones de lo que sean (Bien también ),
y que los guionistas de Lost necesitarían otras 6 temporadas para atar cabos sueltos (Mal).
2 de 3 para Lost, luego se puede superar.
Es una novela de misterio sin solución.
Puedo entender esos enganches a series, me pasa con Californication y ahora también me pasa con Spartacus.
Saludos y Paz XD.
Ntchs, eso os pasa por no haberos engtanchado a la otra serie con tramas enrevesadas, descaríos religiosos y enigmas sin respuesta, que era Galactica, pero que le daba cien vueltas a Lost porque tenía naves espaciales y robots asesinos :D
Yo no soy creyente y aborrezco el final de Perdidos.
Pero desde mi punto de vista, una vez visto que no se refieren a una sola religión en concreto (puesto que están multitud de símbolos religiosos contemplados, que creo yo que es para respetar a los distintos personajes que han pasado por la ficción) no deberías pensarlo “en el bloque católico” sino en que sí hay un “dios”. El error es pensar que esa luz que hay fuera de la iglesia es la típica luz celestial al final del tunel y no, precisamente, la luz de la isla, única responsable de haber creado para sus salvadores una despedida para “live toguether, die… toguether”.
Así lo veo yo. Con todo lo tomadura de pelo que me parece.
Personalmente. creo que es prácticamente imposible acabar bien una serie larga a menos que se haga “trampa” (“trampa” es, por ejemplo, lo que se hace en las comedias de situación al recurrir al pañuelo y a la nostalgia de la separación de los personajes. Creas un capítulo muy emocionante pero prácticamente independiente de la serie). Las otras, en especial las de misterio, tienen el problema de que el final ha de ser la guinda del pastel y que, si se han hecho bien las cosas y cada capítulo ha superado al anterior, a los seis años el pastel tiene una altura imposible de coronar.
Dicho esto, creo que también hay mucho de fanatismo en el disgusto de algunos.
Hay al menos dos películas legendarias que tienen un final en la misma onda que éste (digo la misma onda, no igual). La una es “2001”, la otra, “El sexto sentido”. En la primera, el lugar donde envejece y renace el protagonista es muy similar en concepto a la isla (no deja de ser también un “purgatorio” donde la raza “creadora” convierte al homínido en ser superior), en la segunda, alguien tiene que atar cabos sueltos y congraciarse consigo mismo antes de llegar a su destino final. ¿La diferencia con ésta? Que las referencias religiosas están mucho más encubiertas.
¿No será eso, las referencias religiosas, lo que molesta a muchos?
Un saludo.
Lost es lo que tiene cuando los guionistas van improvisando. Ellos mismos iban creando las trampas y los puzzles sin saber cómo carajo lo iban a explicar algún día. Si, ese final que vieron lejano pero que irremediablemente llegaba. Cuando se quisieron dar cuenta no sabían, no podían NO TENÍAN NI PAJOLERA IDEA
Estoy totalmente de acuerdo con este post.
Yo a partir de la cuarta temporada ya me empecé a desencantar con la serie y mi desencanto fue variando gradualmente hacia la indignación a medida que avanzaba la trama. El único motivo por el que seguí viéndola fue por la promesa de una resolución de ese contrato implícito.
Realmente me parece un timo basar una serie en esa premisa y que luego no se respeste. Cuando en el piloto nos enseñan un oso polar, un monstruo en la selva o a Charlie finiquitando el capítulo con la frase, “¿Dónde demonios estamos?”, está claro que centran el gancho de la serie en ese misterioso lugar, ésa es la pregunta principal y esa es la respuesta que todo el mundo quiere conocer.
Cuando los creadores de la serie prometen una y mil veces que todo está pensado, que tiene su lógica, que todo será respondido, estan fomentando esa idea de la promesa de una resolución.
Cuando Carlton Cuse sale a los piquetes en la huelga de guionistas con una pancarta en la que pone “Do you want to know what the Islan is?” siguen fomentando la resolución.
Cuando los guionistas dicen que tienen el final pensado desde el principio… Bueno, ya me entendéis, ¿no? Al final resultó que el final al que se refererían era medio folio escrito por J.J.Abrams hace 6 años con la escena de Jack hablando con su padre muerto en la Iglesia, nada del resto, de la Isla ni del misterio.
En mi opinión, después de alimentar el ansia de las respuestas a los misterios lo que no pueden hacer es inventarse en la última temporada esa realidad parelela que a nadie le importaba un comino y convertirla en el giro final del capítulo último desvelando que es un purgatorio, porque estan respondiendo una pregunta que nadie les ha hecho y estan dejando de responder todas las otras que sí. Y lo que sobretodo no deberían hacer sin que se les cayera la cara de vergüenza es decir: “Esta siempre ha sido una serie de personajes y el final es legítimo con eso” cuando como ya he dicho ellos mismo han alimentando el ansia de respuestas.
En mi opinión la Isla siempre fue el purgatorio pero como era una resolución que todo el mundo vio venir al momento luego tuvieron que improvisar y marearon la perdíz mientras se les ocurría otra cosa. Finalmente se como eso no pasó inventaron el mundo paralelo que les funcionó para terminar la serie como tenían pensado pero con un purgatorio diferente.
Pues eso del papelito de J.J. donde ya tenía un final con Jack y su padre muerto hablando en la iglesia me hace pensar que igual siempre han querido contar lo que vimos en el final y lo que se les ha ido de las manos es todo ese rodeo por la Isla y el tiempo que se han marcado. A ver si va a resultar que tenían un final blandito y lo que les ha salido bueno, bueno es el rebobinado.
No sé, en mi opinión un lugar en el que hay restos de muchas épocas y culturas diferentes que hablan sobre la vida y la muerte porque toda la humanidad habría pasado por allí, un lugar en que no se pueden concebir hijos porque en la muerte no sería lógico poder crear vida, un lugar en el que la gente moría casualmente justo en el momento en que se redimía del pecado que mostraba su flashback con lo que ya podía ir hacia “la luz”, un lugar del que al principio era imposible salir pues si estás muerto estás muerto, un lugar en el que un monstruo escaneaba tu vida y te juzgaba según tu pasado como paso previo a ir al cielo o al infierno, etcétera, etcétera, a mí me cuadra bastante con un purgatorio. Por eso creo que esa era la primera idea que tuvieron y que todo el mundo acertó demasiado pronto y que por ello los productores cambiaron el rumbo. Probablemente en la tercera temporada, cuando se sacaron de la manga aquellos flashes de Desmond.
Pero sólo es una opinión post-final de serie, antes no pensaba eso pero visto lo visto tiene sentido.
Creo que ya somos unos cuantos que tenemos la misma teoria de que la idea original era que la isla era el purgatorio (lee mi comentario en el post anterior, que también va sobre Lost).
He de reconocer que tú, humilde espectador, lo expresas mejor:
“Estan respondiendo una pregunta que nadie les ha hecho y estan dejando de responder todas las otras que sí”.
Bien dicho.
Buena serie. Final decepcionante. El de Los Soprano fué mejor. Aunque para mi la serie con mejor cierre fué “The Wire”.
Leído tu comentario del post anterior. Parece que estamos totalmente de acuerdo y ésa es la sensación que a muchos les ha debido quedar. Quién sabe, quizás dentro de unos años a alguien se le vaya la lengua y confiese que esto que decimos es lo que realmente pasó.
Un saludo.
El final de The Wire, efectivamente, es extraordinario. Pero me parece más sencillo terminar una serie de ese tipo que una como Lost. Nadie se queja porque sea previsible, y en realidad lo es: que todo continúa, que a rey muerto rey puesto.
Otro final muy bueno fue el de A dos metros bajo tierra.
Mi relación con Lost fue de un paulatino desencanto, así que el final tampoco me ha decepcionado. Es como una novia a la que ya apenas le hago caso y que me dicen que me está poniendo los cuernos. Pues chao y a otra cosa.
Un saludo!!
La pregunta central no es “¿Qué pasa en la isla?”. Una historia cuya premisa central se basa en la pregunta “¿Qué está pasando?” es automáticamente una porquería. En mi opinión plantearse eso es no haber entendido nada de la primera temporada. La cuestión central de Lost es “¿Por qué están aquí estos personajes, y cómo van a salir de la isla?”. Hay mucha diferencia entre un planteamiento y el otro, un viaje muy diferente que recorrer y una experiencia muy distinta que vivir.
Yo jamás he visto la isla como un purgatorio. Es la solución más sencilla y simplona. Viendo la naturaleza de la serie es más que lógico entender que no la habrían considerado, pues cualquiera podría anticiparse al final. Además, eso se desmintió tras la emisión del piloto.
Francamente, el mensaje que encierra la resolución de la serie me parece mucho más poético e interesante que el haber ofrecido las respuestas masticadas a los espectadores. Yo opino que el tiempo acabará afianzando lo finado de este final.
Saludos Nomzamo,
Si lees bien mi comentario verás que yo no he propuesto como premisa “¿Qué está pasando?” sino “¿Qué es la Isla?”, y más importante aún, esa premisa la propuesieron los propios guionistas y los productores desde el piloto y a lo largo de toda la serie.
Un ejemplo de ello son toooooooodas las ocasiones en que algún personaje ha preguntado explícitamente qué era la isla y todas las veces que otro personaje explícitamente ha dado una respuesta (el infierno, una caja mágica, nuestro destino, una concentración de energía electromagnética…). A lo largo de la serie los guionistas han jugado con la definición de lo que era la isla habida cuenta de que conocían el ansia de los espectadores por obtener la respuesta a esa incógnita.
Ése es el error que se le recrimina en este post al planteamiento general que han hecho de la historia si es que ya sabían que al final no se iba a dar una respuesta explícita y concreta a eso, y yo coincido con que ése ha sido el gran fallo.
En la Finale los productores han salido por peteneras abusando de flashbacks que retrotraen al espectador a los momentos más emotivos de la serie intentando desviar su atención del resto de componentes relacionados con los misterios que siempre han tenido una importancia igual o mayor para el éxito de la serie.
Lo que me parece una ingenuidad es concluir que Lost en realidad es una serie de personajes y que un final que se centra únicamente en ellos es legítimo. Ya me disculparás pero eso es una falacia. Lost no es Anatomía de Grey, Lost tenía muchos más elementos a los que les debe su éxito y estos elementos han sido burdamente desatendidos y maltratados en esta última temporada y por consiguiente se le ha faltado al respeto al espectador y al contrato implícito que se “firmó” con él después de que Charlie dijera “¿Dónde demonios estamos?” y todos nosotros volvimos a la semana siguiente para ver el segundo capítulo para averiguarlo.
Sin más, un saludo.
Saludos Humilde espectador
Perdón por haber malinterpretado la cuestión central que suponía planteabas, pero aún así sigo teniendo muy claro cuál es la gran pregunta al conjunto de la serie. En mi opinión, que los personajes se pregunten qué es la isla obedece más a un McGuffin que a la columna vertebral de la premisa de la serie entera. Eso es muy importante para los personajes, pero no para la historia. El argumento y el tema lo van definiendo las acciones, no las puntuales líneas de diálogo que tienen la función de ganchos. A mí me parece ingenuo creer que el objetivo de Lost, con lo elaborada que estaba siendo, fuera ofrecer simples explicaciones a los misterios de la isla. Por favor, eso es de lo más chorra.
Lost no era Grey’s Anatomy, por supuesto que no. Sus personajes eran mucho más interesantes, y desde un principio, a pesar de los misterios de la isla, dejaron bien claro que lo que realmente importaba pasaba fuera de la isla. ¿A nadie le extrañaron lo elaborado de los flashbacks, personajes y estructura? ¿Nadie vio venir ya desde la primera temporada que la alambicada trama de la isla era una excusa para decir algo más? ¿Que cada vez que pasaba algo en la isla saltábamos a un flashback para reflejar eso (explicarlo, si se quiere) en los personajes?
Me hablas de un contrato implícito establecido en el piloto. Pero después del piloto han venido seis años de serie en la que pienso han ido demostrando, paso a paso, que la pregunta no era esa. ¿Qué intentan los personajes, saber qué pasa en la isla o salir de ella? ¿!ué sienten los personajes, que no entienden nada de lo que pasa o intentan comprender por qué les pasa lo que les pasa? ¿Por qué nadie de los que esperaba respuestas a los enigmas habla nunca de los flahbacks? ¿No atendía a ellos?
Saludos
Hola Nomzano,
En mi opinión es muy fácil decir ahora, a toro pasado, que la Isla era un McGuffin. Eso debería haberse aclarado en su momento y no haber reforzado la idea contraría que es de lo que aquí se acusa a los firmantes de la serie.
Tú comentas que en 6 años ya se debía haber visto que la trama se centraba en los personajes y no en la Isla. Bueno, precisamente en 6 años nadie parecía haber visto que la Isla era un McGuffin y eso ha sido así porque en ningún momento se ha insinuado tal cosa. Además que un McGuffin puede usarse en una historia de hora y medio o dos horas, pero no puede ser el reclamo publicitario por excelencia de una producción de 121 episodios.
Por otra parte yo no estoy cayendo en el maniqueismo de personajes o misterio, sino que yo he acusado al episodio final precisamente que centrarse sólo en los personajes. Yo hubiera querido un cierre de serie que concluyera todo porque ambas cosas han sido el leiv motiv de la trama. Si me centrara en la sexta temporada por completo podría criticar ciertos otros atropellos a la razón, pero como toda la temporada fue creada especialmente para ese episodio en concreto me centro en él.
Comentas lo que los personajes pensaban o sentían respecto a la isla, pues mira, ese es precisamente uno de los mayores defectos que le he encontrado siempre a Lost, que los personajes no hablaran entre ellos de todo lo que les estaba pasando. Porque si Ecko llega y dice que se ha encontrado con un humo negro que le ha escaneado, Locke comenta que ha tenido un sueño premonitorio, que ya no es paralítico o que se le ha presentado Walt de mayor o si Hugo explica que ha visto a su amigo imaginario, entre todos podrían haber querido resolver el misterio. Pero eso no interesaba a los guionistas, el hermetismo y la dosificación de la información sobre los misterios de la Isla tanto de forma intrínseca en la trama como extrínseca por parte de sus autores siempre ha sido una constante con la que han jugado para ganar espectadores y por eso es injusto no haber satisfecho esa necesidad de información que ellos mismos crearon.
No, no se puede decir que los misterios eran accesorios en la trama y tampoco se puede decir que su resolución fuera prescindible, me parece del todo incoherente con el espíritu y enfoque de la serie.
Saludos.
Hola de nuevo
Yo vengo diciendo eso desde hace al menos tres años, que lo que ocurre en la isla no es lo importante. Se lo decía a mis amigos que no veían la serie por todo lo que pasaba en ella, que le parecían estupideces. Y no soy el único que se daba cuenta de ello, te lo aseguro. Es más, me parecía tan lógico que realmente me sorprende que digas lo contrario.
Yo creo que los guionistas han mantenido su manera de hacer las cosas de principio a final: jamás han explicado nada, una pregunta llevaba a otra pregunta, y así hasta el final. Está claro que a la serie le sobran mil cosas, y que a menudo ha habido soluciones de estar por casa, pero lo que me parece de cajón es que lo que pasaba en la isla, sus misterios, no era lo importante en esta serie. Lo que pasaba en la isla era importante para los personajes, pero no para el drama. Y esa es la deficinión exacta de lo que es un McGuffin.
Saludos.
La idea de la isla como purgatorio encacajaba perfectamente, pero había más opciones que podrían haber sido muy plausibles, y que nos hubieran impactado tanto o más. Me refiero a la trama de los viajes en el tiempo que durante tanto tiempo explotaron. Una teoría que leí era que, “debido a sus condiciones magnéticas especiales”, la isla no se encontraba en el mismo plano temporal que el resto del mundo, sino unos cinco años antes.
Esta teoría explica el interés de la coorporación dharma por la isla, y los experimentos que realizaban. Entre ellos,porqué había que pulsar la tecla, para no liberar la energía que mantenía la isla fuera del plano temporal..de hecho, cuando dejan de pulsar la tecla Desmond viaja viaja en el tiempo a su pasado, y es capaz de predecir el futuro.
Tambien explicaría algunos misterios, como la recuperación milagrosa de locke o de ¿? la mujer con cancer! Es decir, la isla no curó sus enfermedades, sino que cinco años atrás aún no habían desarrollado dichas enfermedades. Igualmente explicaría porqué el padre de jack estaba vivo, porque cinco años atrás lo estaba.
¿Porqué jacob pudo influir en la vida de tantas personas y hacer que llegaran a la isla? Porque podía desplazarse en el tiempo, y pudo corregir sus vidas a conveniencia…
Como último misterio importante a resolver quedaría el humo negro, a este respecto podrían haberse dado varias soluciones. La respuesta mística sería que el humo es el destino, quien corregiría las perturbaciones que la isla producía en el futuro. Por ejemplo, si alguien como el señor eko debía morir en el futuro, el humo negro lo llevaba a cabo. Es decir, la isla no permitía a nadie salir de ella, para no alterar el futuro, y el humo negro se encargaba de ello. La segunda teoría, estaría relacionada con la ciencia ficción: el humo negro es un ser o una invención del futuro. Me explico, si dharma consiguió controlar los viajes en el tiempo, es posible que viajasen al futuro y adquiriesen una tecnología desconocida en el presente (de ahí el ruido metálico asociado el humo negro).
Perdón por extenderme tanto. En resumen, creo que había mucho margen para dar respuestas satisfactorias. ¿Qué tuvo de bueno el verdadero final para mi? El misterio de la isla continua, al estar todos sus habitantes conocidos muertos, queda el camino despejado para nuevos habitantes..
Una teoría interesante…
Como he puesto en otro post, no he visto la serie completa, solo episodios sueltos y la primera mitad de la ultima…
Me parece que hablas de otra serie por qué la serie yo he visto ha sido incapaz de “engancharme”, de “obligarme” a ver el siguiente episodio para resolver las preguntas que supuestamente se creaban…
No he visto el final pero por todos los comentarios que he leído me parece que habrá sido como el final de Los Serranos, con un final un poco “chapucero”…
Podría leer el post sin escribir algo pero en el momento que afirmas que es la mejor serie de la historia de la televisión… no paro de pensar en el tiempo que gastas/has gastado viendo todas las series que se emiten/han emitido en todos los países que tienen industria televisiva… y me pregunto de donde consigues tiempo para hacerlo…
Otra cosa sería afirmar que “es la serie que más te ha gustado”…
“It’s good to have a plan, but at the same time the most important plan is making the next episode really good. That’s the only job that Carlton and I and everybody else on this show has ever had.”
http://scifiwire.com/2010/05/dude-it-turns-out-losts-c.php
Saurium, como decía mi profesor, antes de empezar a contestar las preguntas del examen, hay que leerlo con atención.
El autor del post habla siempre desde la subjetividad. Se refiere a “Lost” como la serie que PARA ÉL es… o fue, la mejor de la historia de la televisión.
No entiendo esa agresividad injustificada. ¿Por qué debería el autor del post verse todas las series del mundo? No puedo imaginar una tortura más cruel y refinada.
Un saludo a todos
Hola,
Yo lo decía por qué es diferente afirmar (como lo hace Curro en el texto),
“Sólo se trataba de una serie de televisión, la mejor de la historia… hasta que dejó de serlo.”,
que afirmar (como lo hace en una respuesta más abajo),
“Lost me parecía la mejor serie de televisión que había visto en mi vida.”
Son pequeñas diferencias…
Un saludo….
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Hola, soy el hijo de Jack y vengo a decir que el cabronazo de mi padre, que se tiró todo un capítulo dicíéndome que me quería mucho y me apoyaba en todo, me ha dejado tirado como un trapo porque dice que no existo y que todo estaba en su imaginación. También podía haber dicho que se iba por tabaco si no quería hacerse cargo de mí y no quería verme tocar el piano. Es un pedazo de gilipollas y el imaginario lo será su puto padre, que es un fantasmón. Menuda familia me ha tocado, hay que joderse.
A ver si precisamente se titula Lost por lo perdidos que vais todos…(lo sé, muy malo)
Hola. Soy el ruso al que lo mata un puto moro de un tiro en el ojete estando en el limbo ese. Quiero que alguien me diga que hago ahora, porque no sé a dónde ir. De momento estoy en lo que parece ser una estación de metro con un tipo raro vestido con sotana negra, con pinta de bujarra, que dice que se llama Neo. ¿Qué clase de nombre es Neo? Dice que estamos atrapados entre dos mundos y no para de darme la brasa con algo como “el desierto de lo real” y no sé que gilipolleces. Yo lo que quiero saber es que pasa cuando te matan en el limbo estando ya muerto, a no ser que yo no exista, que me dice el bujarra del metro que a lo mejor yo soy un programa. A punto he estado de meterle una hostia al Neomarica este.¿QUÉ HAY DE LO MÍO?¿EH?
Hola, Soy Aaron, el hijo de Claire. Estoy de acuerdo con el hijo irreal de Jack que esta familia es un cachondeo. Porque yo ya estaba en la universidad, follando como loco en las fiestas de mi hermandad, cuando la palmé tontamente por culpa de unas drogas caducadas. Y entonces veo una luz y resulta que estaba saliendo del coño de mi madre otra vez, que me estaba pariendo en el limbo. Y claro, yo recuerdo toda mi vida, pero ahora soy un bebé, tengo una micropolla y todo el mundo me hace monerías cuando yo lo que quiero es beberme una cerveza.¡Y ni siquiera puedo decir otra cosa que “gugú”! A mí esto me parece una putada muy grande y quiero saber si me voy a pasar toda la eternidad cagándome encima.
Hola a todos los que habéis participado. Muchas gracias por los comentarios.
Disculpad mi tardanza en contestar, pero no tenía a mano el ordenador. Acabo de llegar de ése encuentro de guionistas en Comillas, que por cierto, ha estado muy bien.
Me gustan muchos de los comentarios que habéis puesto, sobre todo porque de manera premeditada evité acercarme a los múltiples blogs y foros de y acerca de la serie. No estaba al tanto de la generalizada teoría de la isla como purgatorio, pero realmente suena como la más plausible. Si la serie empezaba con ellos estrellándose y ya se sabía que terminaba con ellos descubriendo que estaban muertos y emprendiendo juntos un nuevo “camino”… lo de en medio no podía ser otra cosa que un lugar intermedio entre la muerte y la vida. Supongo que entre medias, la cosa se descarriló, mayormente debido al éxito y a la necesidad de intentar sacar una o dos temporadas más, las que sobran.
Bueno, así de repente, me recuerda mucho a Cube, de V. Natali, una película que por cierto, me fascina.
También quería decir que el hecho de que opine que es una obra fallida, no significa necesariamente que reniegue de ella en bloque. Al contrario. Insisto e insistiré que hasta el inicio de la quinta temporada, Lost me parecía la mejor serie de televisión que había visto en mi vida. (Efectivamente, no he visto todas las series del mundo, sólo las que me ha dado tiempo a ver. Ése era el sentido de mi afirmación)
Y finalmente, decir que pienso seguir viendo las series de J.J. Abrahams. De hecho, estoy disfrutando como un enano con Fringe. Creo que es un buen ejemplo de trama general ambiciosa… pero controlada. Los finales de las dos temporadas han sido fabulosos, y en esta segunda temporada hemos tenido al menos un capítulo, el 18, White Tulip, a la altura de The Constant.
Ya, pero recuerdo que en los extras de la primera temporada salían los guionistas hablando, y decían que tenían pensada la serie para 6 temporadas. Y me lo ví en el momento, no fue un añadido a posteriori, me compré el cofre cuando salió. Pero estoy de acuerdo contigo en que “sobran” un par de temporadas, así que no sé si lo de las 6 era un farol a la vista del éxito de la primera temporada.
Un saludo!!
Creo que a partir de segunda temporada, los guionistas tenían preparado el final como Dios manda, pero desde la productora tenían otros planes y les propusieron alargar un par de años la serie, sin lugar a dudas todos se iban a forrar. Creo que a desgana, los guionistas aceptan, pero a foro interno, hacen una reflexión que marcará el resto de temporadas: “Si quieren un culebrón, escribiremos un culebrón…” y así lo hacen hasta el final de la quinta, justo cuando los que mandan deciden que ya basta de dar vueltas y dar todo tipo de excusas argumentales que no se aguantan ni se podrán ya resolver, son demasiadas preguntas y un folio DinA4 no da para tanto. El marrón de la última temporada era un reto que estaba “perdido” desde el principio, sobre todo para los que esperaban más de una serie que ha despertado tantas expectativas…
http://www.youtube.com/watch?v=XFKoxKQHOk4
Lost es como Ronaldiho, siempre nos quedará la primera temporada!!
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